Hace ya un poco más de 8 meses que Esteban Kraus, un habitante de la localidad, quien tras estudiar por varios años en el Conservatorio y estar otros tantos por fuera del país en búsqueda de nuevos rumbos y ritmos, se acercara la Casa de la Juventud con una iniciativa que cambiaría la vida de muchos chicos y chicas.

 

Esteban, un hombre emprendedor y con un gran oído musical, al escuchar las voces de algunos de los niños y niñas que asistían al comedor comunitario Juan Pablo II, y tras ver las difíciles circunstancias que tenían que vivir a diario estos chicos, decidió tomar cartas en el asunto y así brindarles un espacio en el que pudieran construir con sus voces,  días más coloridos y sobre todo llenos de esperanzas.

 

Fue así como conformó un pequeño grupo de jóvenes interesados en educar sus voces y sin dudarlo pidió el apoyo de la Casa de Juventud en donde le brindaron un espacio adecuado y seguro para poder desarrollar sus talleres lejos de las calles y los vicios.

 

Al día de hoy son más de 26 los chicos que se benefician de estas clases y asisten puntualmente a su cita diaria con el maestro Kraus, quien no solamente les enseña técnicas vocales, también les inculca valores, les ayuda con sus tarea  y les enseña algo de inglés para que puedan entender lo que dicen las óperas que cantan, ya que la mayoría están escritas en este idioma. Aunque las clases son gratuitas, se exige contundentemente que quienes asistan al coro tengan un buen nivel académico y que no decaiga pues si las calificaciones escolares bajan no pueden seguir con las clases musicales en tanto no se mejore.

 

Para estos chicos la vida no es color de rosa, pero se esfuerzan por volverla púrpura, un color que los anima a  seguir luchando por sus ideales. El Coro de ‘Voces Púrpura’, de la localidad de Los Mártires, ya se proyecta para su primer concurso y con seguridad escucharemos hablar de él muy pronto ya que es un coro donde sobra talento y ganas de hacer de esta ciudad una ‘Bogotá Mejor para Todos’.