Con batucada, mujeres mayores de Usaquén enfrentan el machismo

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Bogotá, mayo 20 de 2019. “Nunca había tocado un tambor, tenía medio idea, pero nunca”, dice doña Ana Isabel Murcia de 65 años, quien gracias a la batucada de mujeres mayores del centro día ‘La Casa en el Árbol’ de la localidad de Usaquén, pudo cumplir su sueño de aprender música. Es una mujer feliz.

“Me gusta la música porque la música es alegría. Es una bendición estar en estas actividades, sobre todo porque el ‘profe’ es de un genio muy lindo para enseñarle a uno”, afirma doña Ana, quien hace parte, junto con otras 40 mujeres mayores de este grupo, coordinado por el licenciado en música Dany Osorio.

Para Dany, este proceso, que inició hace dos meses como una exploración, es la posibilidad para demostrarle a las mujeres mayores que las limitaciones solo existen en la mente.

“Ellas tienen toda una historia de vida que han construido, y a veces esos paradigmas realmente los tienen muy arraigados. Entonces decirle ‘usted puede’ a una persona que es mayor, que tal vez cree que no es así, cuando se logra cambiarles ese esquema, se pueden encontrar cosas mucho más bonitas y es que ellos entiendan que no hay límites”, asegura Osorio.

La batucada hizo su primera presentación en el parque fundacional de Usaquén, lo que para muchas de sus participantes fue una manera de demostrarles a sus familias los frutos de su proceso.
 

“Mi hija fue feliz de verme ahí con mi batucada, todas uniformadas, fue con mi nieto, y mi nieto me dijo: ‘abuelita, te ves hermosa’”, cuenta con una sonrisa doña Socorro Reyes, mujer mayor de la batucada.

También para la familia de doña María Ligia Torres, otra de las participantes, fue toda una sorpresa verla tocando con ánimo un gran tambor que llevaba el ritmo. “Uno va experimentando cosas que uno no hizo en su juventud porque tenía su hogar o por cuidar a los niños”, dice.

Precisamente, que el grupo sea solo conformado por mujeres las ha empoderado para enviar un mensaje contra el machismo.

“Personalmente me sirve como el ser líder, que la mujer es tan importante como el hombre y tenemos las mismas capacidades. Nosotras como mujeres, a pesar de la edad que tenemos, podemos avanzar”, sentencia doña María Ligia.

Las mujeres mayores quieren que se mantenga este espacio de aprendizaje, en el que también incursionarán en el manejo vocal y en instrumentos de cuerda y de vientos.

“Yo tengo que sacar ese tiempo para mí, digo yo, soy importante. Me queda este tiempo para regalármelo, para no quedarme mirando una novela, qué pereza, no, sino haciendo cosas que me van a traer alegría”, dice María Ligia. 

 
 
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