Secretaría Distrital de Integración Social

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Más de 500 ciudadanos habitantes de calle recibieron alimento y oferta de servicios durante jornada Manos a la calle

 

  • La actividad se realizó en articulación con la Fundación Clínica del Hogar en el marco del Mes de la Habitabilidad en Calle.
  • Alimento, escucha activa y procesos de cedulación fueron dispuestos para los participantes.

Bogotá, noviembre 14 de 2022. Con costales, bolsos, cajas y carretas se fueron acercando los ciudadanos habitantes de calle a la Plazoleta Flores de la localidad Los Mártires. El escenario estaba listo y ellos, al llamado de la música, las muestras artísticas y el alimento, llenaban cada uno de los espacios.

Fueron más de 500 ciudadanos y ciudadanas habitantes de calle los que se reunieron para ser parte de esta jornada llamada Manos a la calle y organizada por la Fundación Clínica del Hogar en articulación con la Secretaría de Integración Social.

“Estamos trayendo cedulación, escucha activa, comida y toda la oferta institucional para dignificar la vida de las personas que habitan la calle. Esto lo hacemos en el marco del Mes de la Habitabilidad en Calle y a través de la articulación que hemos hecho con las organizaciones”, mencionó Camilo Pérez, líder de Políticas Públicas de la Subdirección para la Adultez de la Secretaría de Integración Social.

Durante la actividad se presentó la batucada de Idipron, artistas locales, raperos y población habitante de calle que quiso subir al escenario para expresarse, cantar y agradecer por la actividad que hizo un alto en su día a día y les permitió compartir en un espacio dispuesto exclusivamente para ellos.

“Lo que estamos haciendo hoy es sentar un precedente para que estemos unidos y trabajemos más por la prevención de adicciones en los niños, niñas y adolescentes. Necesitamos que la sociedad nos apoye”, resaltó Harold Correa, director de la Fundación Clínica del Hogar y exhabitante de calle que ahora comparte el mensaje de transformación y entrega alimentos y bebidas calientes a población que habita las calles, trabajadoras sexuales, vendedores ambulantes y personas en necesidad de esta zona de la ciudad.

Franklin García, uno de los participantes que lleva cerca de 41 años habitando las calles de Bogotá, disfrutó cada una de las actividades y con una sonrisa de alegría dijo: “Esta es una obra grande, una obra bien hecha”.

Durante la jornada también fue inaugurado El Escuchadero, un espacio diseñado por el equipo de Políticas Públicas de la Subdirección para la Adultez, con el propósito de atender las necesidades en salud mental de la población habitante de calle, con psicólogos, trabajadores sociales, promotores y profesionales de otras áreas y disciplinas que activan la ruta de apoyo para el ciudadano.

De igual forma, se tomaron listados para realizar procesos de cedulación con los habitantes que se encontraban sin su documento de identificación.

Manos a la calle fue parte de las actividades que se realizan durante noviembre, Mes de la Habitabilidad en Calle, para dignificar la vida de estos ciudadanos y ciudadanas.

Conoce la agenda completa aquí

 

 

 

Ciudadanos exhabitantes de calle, protagonistas en la Eco Feria Empresarial José Félix Restrepo

 

 

  • Productos de la huerta urbana de la Comunidad de Vida El Camino, así como tejidos elaborados por ciudadanos exhabitantes de calle de La Maloka fueron visibilizados en la Eco Feria Empresarial.

 

Bogotá, D.C., noviembre 9 de 2022. Fortalecer capacidades para retomar la autoestima, así como procesos de autonomía en ciudadanos habitantes y exhabitantes de calle es, quizás, una de las estrategias a las que más apunta la Secretaría Distrital de Integración Social para alejar de las calles a hombres y mujeres que por diferentes circunstancias optaron por vivir en andenes, parques o canales. 

Por eso, se llevó a cabo, en la sede del Colegio Distrital José Félix Restrepo, la Eco Feria Empresarial con la participación de estudiantes del plantel, así como organizaciones públicas y privadas y ciudadanos exhabitantes de calle, quienes avanzan en procesos de inclusión laboral a través de iniciativas productivas. 

Participantes de la Comunidad de Vida El Camino y del Centro de Capacidades y Desarrollo de las Mujeres La Maloka, visibilizaron en sus espacios los productos cultivados por ellos en la huerta, así como los tejidos y confección de bolsas elaboradas en La Maloka. 

Viviana Martínez es una de las participantes de La Maloka,  junto a 79 mujeres más busca desarrollar un proyecto de vida a través de espacios como la Eco Feria. 

“Estamos mostrando nuestros emprendimientos, nuestras capacidades para realizar cualquier producto o artesanía. Mi madre trabaja en máquina plana confeccionando ropa y yo aprendí de ella y en Maloka pude retomar y perfeccionar esta habilidad. Me siento feliz de ver mis productos exhibidos acá y que la gente me los compre”, destaca la beneficiaria. 

 

 

Andrea Rodríguez, otra de las participantes resalta la calidez de los profesores. “En La Maloka los talleristas nos enseñan con mucho afecto a trabajar con diferentes materiales amigables con el medio ambiente y nos hacen sentir muy bien además de capaces”, puntualiza la beneficiaria.   

Por su parte, Tatiana Celi, líder del equipo de Adultez y quien acompaña los emprendimientos destacó las habilidades de los ciudadanos exhabitantes de calle. “Hoy en la Ecoferia Empresarial estamos presentando una variedad de productos que van desde el rábano, cilantro y calabaza cultivados en El Camino, así como las moñas, balacas y tejidos trabajados por nuestras mujeres en La Maloka. Actividades que responden a procesos de generación de autonomía en cada uno de los participantes de estos centros, transformando la atención asistencialista en procesos de auto gestión digna”, afirmó la funcionaria. 

Con la participación en estas ferias de emprendimiento, la Secretaría de Integración Social prioriza atender al ser humano en alta vulnerabilidad, además de retomar valores y aptitudes para llevarlos a sentirse importantes en la sociedad, y despertar en ellos la motivación suficiente que los empuje a la búsqueda de un trabajo digno y quizás con ello muchos de ellos convertirse en protagonistas de sus propias empresas.

 

 

 

 

 

 

 

Con más de 200 prendas de vestir, Servientrega y Mujeres de Éxito dicen ¡manos a la calle!

  • Durante noviembre Bogotá conmemora el Mes de la Habitabilidad en Calle con actividades que benefician y dignifican a la población que se encuentra en proceso de inclusión social y a aquellos que continúan su vida en calle.

 

Bogotá, 03 de noviembre de 2022. La Fundación Mujeres de Éxito, con el apoyo de Servientrega y del proyecto Dona tu corazón, de RCN Radio, hizo entrega de más de 200 prendas de vestir como zapatos, camisetas y pantalones para población habitante y exhabitante de calle del Centro de Desarrollo Integral y Diferencial- Proyecto de Vida (CEDID-PV).

“Esta sinergia que hemos logrado con Servientrega y la Fundación Mujeres de Éxito ha sido muy importante para fortalecer los procesos de inclusión social de la población habitante de calle. El fenómeno social de la habitabilidad en calle nos incluye a todos y el sector privado es un aliado fundamental”: indicó Fabián Rico, coordinador de Abordaje Territorial de la Subdirección para la Adultez de la Secretaría de Integración Social.

Ya son cerca de tres años en los que Servientrega y la Fundación Mujeres de Éxito apoyan a la población habitante de calle de Bogotá. Durante la pandemia fue significativa la labor realizada con la entrega de insumos de bioseguridad que permitieron proteger y evitar contagios por covid-19 en la población.

“Estamos entregando amor, esperanza y sueños a las personas más vulnerables del país. Queremos que el habitante de calle también vea que la empresa privada tiene el empeño de ayudarlos, empoderarlos y visibilizarlos”: resaltó Karen Cortés, Analista Administrativa y de Proyectos de la Fundación Mujeres de Éxito.

Por su parte, Sebastián Triana, de la Sección de Protocolo de Servientrega, mencionó: “La población habitante de calle es la menos escuchada y favorecida, por esta razón, como empresa queremos brindar ese apoyo y esperanza; entregando alegría y aportes que puedan utilizar. Debemos ponernos en el lugar de ellos y dar lo mejor de nosotros”.

Con baile, música, bingo y actividades recreodeportivas se llevó a cabo esta jornada de integración y entrega de aportes para la población del CEDID-PV.

Sandra Correa, exhabitante de calle y una de las beneficiarias del centro de atención, resaltó: "Toda la vida hemos sido excluidos y esta es una forma de integrar a la sociedad con nosotros. Es recibir el espíritu de otras personas queriéndote ayudar con una sonrisa y una buena palabra de aliento”.

Esta jornada se realizó en el marco de las actividades que organiza la Secretaría de Integración Social para conmemorar el Mes de la Habitabilidad bajo el lema Para dignificarnos: ¡manos a la calle!

 

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De llevar un costal al hombro a recorrer el antiguo Bronx, libre y a ritmo de tambores

  • Bogotá inició la conmemoración del Mes de la Habitabilidad en Calle bajo el lema Para dignificarnos: ¡manos a la calle!
  • Durante el mes se desarrollarán más de 50 actividades lideradas por la Secretaría de Integración Social e IDIPRON.

Bogotá, D.C., 1 de noviembre de 2022. Empezó a fumar marihuana a los 9 años, pasó por el pegante y otras drogas, hasta que a sus 14 años llegó a las calles del llamado Cartucho, donde deambuló día y noche con un costal al hombro, sin saber que había una vida más esperando ser vivida.

Este es el caso de Mauricio Niño, uno de los más de 9.538 habitantes de calle que tiene la ciudad y por quienes durante noviembre se conmemora el Mes de la Habitabilidad en Calle.

Aunque Mauricio transitó las calles y vivió en ellas, como un acto de valentía y libertad, hoy su recorrido fue distinto; fue a ritmo de tambores, música y teatro para recordarse que tiene otro pensamiento y la posibilidad de iniciar una nueva vida lejos de las drogas.

“Hacía muchos años que no pasaba como pasé el día de hoy. Siempre estaba con un costal o una bolsa de basura, pero hoy tengo otro pensamiento: sé que hay una vida aparte de la droga”, concluyó Mauricio con una sonrisa en su rostro, valorando cada momento vivido, en el marco de la inauguración de este mes dedicado a quienes como él están en proceso de integración y a aquellos que continúan su vida en calle.

La inauguración del Mes de la Habitabilidad en Calle tuvo lugar con una colorida y alegre comparsa, en la que a ritmo de batucada y sonido de tambores, los ciudadanos habitantes y exhabitantes de calle, que realizan sus procesos de inclusión en Integración Social e IDIPRON, se tomaron las zonas históricas de este fenómeno social para levantar su voz por los derechos y la dignidad de cada persona que hace parte de esta población.

El recorrido inició desde el Hogar de Paso Bakatá, pasando por el antiguo Bronx, el Bronx Distrito Creativo, la Plaza del Voto y Plaza España, donde se llevó a cabo el acto inaugural, en el que el teatro, el baile y la música fueron protagonistas.

“Hoy es un día de fiesta y alegría. Estamos celebrando el inicio del Mes de la Habitabilidad en Calle. Durante noviembre nos tomaremos la ciudad para visibilizar a nuestra población que habita calle o está en riesgo de habitarla. Con cada actividad que hemos organizado desde el sector social, queremos recordarle a la ciudad que las segundas oportunidades existen, queremos que Bogotá pueda decir: ¡manos a la calle!”, resaltó Carlos Cardozo, subdirector para la Adultez de la Secretaría de Integración Social.

Durante la jornada se condecoraron a distintos actores que han generado un aporte para dignificar la vida de las personas habitantes de calle.  De igual forma, se contó con un espacio de exposición de obras de arte creadas por integrantes del Hogar de Paso Bakatá y del Centro de Desarrollo Integral y Diferencial - Proyecto de Vida (CEDID-PV), la participación de la Orquesta Crossover del Batallón Guardia Presidencial y la presencia de los y las delegadas del Comité Operativo Distrital para el Fenómeno de Habitabilidad en Calle de cada una de las entidades que hacen parte de la implementación de la Política Pública.

El mes de habitabilidad en calle continuará con diferentes actividades, lideradas por la Subdirección para la Adultez de la Secretaría de Integración Social, el IDIPRON, organizaciones sociales aliadas y otras entidades del Distrito.

Conoce la agenda completa aquí.

Datos de atención a población

 En lo corrido del año 2022, se han atendido 8.528 ciudadanos y ciudadanas habitantes de calle en diferentes unidades operativas.

  • A través de la Estrategia Móvil de Abordaje en Calle se han realizado 13.345 atenciones a personas habitantes de calle.

 

Noviembre, Mes de la Habitabilidad en Calle

  • En lo corrido del año 2022, se han atendido 8.528 ciudadanos y ciudadanas habitantes de calle en diferentes unidades operativas.
  • A través de la Estrategia Móvil de Abordaje en Calle se han realizado 345 atenciones a personas habitantes de calle.

 Bogotá, D.C., noviembre 1 de 2022. Bajo el lema Para dignificarnos: ¡manos a la calle!, inicia en Bogotá el Mes de la Habitabilidad en Calle, con el fin de promover y proteger los derechos de los ciudadanos y ciudadanas que han hecho de la calle su lugar de vida y de aquellos que hoy se encuentran en procesos de inclusión social. 

El mes de habitabilidad en calle se conmemora desde el año 2021 como una acción clave para la implementación de la Política Pública Distrital del Fenómeno de Habitabilidad en Calle (Decreto 560 de 2015).

En esta ocasión, se conmemora la segunda versión buscando visibilizar los logros en la atención distrital del fenómeno social en Bogotá y la necesidad de crear mayor articulación para decir: ¡manos a la calle!

De esta manera, se busca implementar acciones estratégicas para el mejoramiento de la convivencia y la dignificación de los ciudadanos y ciudadanas habitantes de calle, en el marco de la promoción, protección y restablecimiento de sus derechos. 

De igual forma, se trabaja en procesos que contribuyan a la inclusión social, económica, política y cultural, así como a la protección integral de la población en riesgo de habitar la calle.

Para dignificarnos: ¡manos a la calle! 

Con diferentes actividades y acciones en territorio, este año, la Secretaría de Integración Social e IDIPRON han organizado una serie de encuentros que tendrán lugar en distintos puntos de la ciudad durante todo el mes de noviembre.

Inauguración Mundialito de fútbol con población habitante de calle. 

Mundialito de fútbol con población habitante de calle

Hora: 8:00 a.m. 

15 - 18 de noviembre de 2022

Lanzamiento oficial Cine a la calle 

Producciones audiovisuales realizadas por habitantes de calle  

Hora: 3:00 p.m.

Lugar: Castillo de las artes

18 de noviembre de 2022

Foro De puertas pa´ afuera  

Hora: 8:00 a.m. - 11:00 a.m. 

Lugar: Universidad la Gran Colombia Sede centro

2 y 3 de noviembre de 2022

Manos a la calle 

Jornada de autocuidado y escucha activa

Hora: 7:00 a.m. - 12:00 a.m.

Lugar: Bronx Distrito Creativo

13 de noviembre de 2022

Café con aroma calle ¿Te lo tomarías?

Conversatorio sobre salud mental en población habitante de calle

Hora: 3:00 p.m.

10 de noviembre de 2022

Las luchas de las mujeres habitantes de calle 

Lanzamiento del libro Severa flor  

Hora: 8:00 a.m.

lugar: Hotel Grand Park

17 de noviembre de 2022

TOMA SOCIAL

conmemoración de la NO violencia contra las mujeres habitantes de calle

Lugar: Canal Fucha con carrera 16 a carrera 27

Hora: 8:00 a.m. 

25 de noviembre de 2022

Cierre cultural del Mes de la Habitabilidad en Calle 

Para dignificarnos: ¡manos a la calle!

Hora: 2:00 p.m. a 8:00 p.m. 

Lugar: CEDID-PV 

Carrera 35 # 10-69

30 de noviembre de 2022

Conoce la agenda completa aquí

 

 

 

 

“Démonos la oportunidad porque sí se puede”: Darnelly, una mujer que decidió dejar de habitar la calle

  • Tras 45 años sumida en el consumo de drogas y de habitar las calles de Yopal y Bogotá, Darnelly decidió darse una nueva oportunidad.
  • Después de su ingreso a la Comunidad de Vida El Rosario, sitio en el que viene retomando su sueño de emprendedora y anhela reconformar su vida familiar, junto a su pareja actual y sus cuatro hijos.
  • Actualmente, la Secretaría de Integración Social cuenta con tres comunidades de vida (El Rosario y La Victoria en Sasaima y El Camino en Bogotá) que ofrecen atención en procesos de superación de la vida en calle y redes de apoyo para la inclusión social.

 

Bogotá, D.C., octubre 26 de 2022.  Darnelly Yepes conoció las drogas en su preadolescencia, eran su refugio, luego del abandono familiar a los cinco años y, de ahí en adelante, su vida estuvo marcada durante 45 años por la calle, sus peligros, y su exposición al consumo hasta que decidió iniciar un proceso de superación de la vida en calle con apoyo psicosocial en la Comunidad de Vida El Rosario.

Es una mujer alegre, bogotana de corazón y trabajadora. Hace siete meses emprendió un nuevo rumbo en su vida luego de acceder a los servicios ofrecidos por la Subdirección para la Adultez. “La llegada hasta aquí fue un poquito complicada, la luché bastante”, señaló Darnelly al preguntarle cómo fue ese paso para ingresar a los programas de la Secretaría Distrital de Integración Social.

Darnelly intentó dejar de consumir sustancias psicoactivas en varias ocasiones, pero siempre desfallecía a mitad del proceso y lo abandonaba sin éxito. Durante 14 años vivió en Yopal, una época que -a su juicio- fue la etapa más estable de su vida porque finalizó su bachillerato, emprendió una microempresa de arequipe y construyó un hogar junto a dos de sus hijos, no obstante, un día volvió a consumir drogas y lo perdió todo.

De vuelta a Bogotá, su vida cambió una vez más, sus hijos fueron acogidos por el Instituto de Bienestar Familiar (ICBF), y comenzó a habitar la calle; se sumió en todo tipo de sustancias, olvidó sus motivaciones y dejó atrás los sueños que estuvo a punto de alcanzar. Recientemente, su hijo menor fue acogido por la mayor de sus cuatro hijos, quien ya es mayor de edad y al igual que el segundo hijo formó un hogar lejos de su madre; actualmente solo uno de sus sucesores continúa en el ICBF.

Ahora trabaja con la bisutería, estudia sobre la crianza de codornices para la producción de huevos y piensa retomar su vocación de empresaria con el apoyo de su novio, con quien ha planeado construir un hogar basado en el amor y trabajo en equipo.

Julián Cometa, trabajador social de la comunidad de vida El Rosario, destacó de Darnelly la entereza que tiene por demostrarle a sus compañeros que sí se puede progresar, porque el poder participar en áreas como el arte, el baile y la cultura son habilidades que demuestran su creatividad, talento y ganas de prosperar. Él manifiesta el gran placer que siente al contribuir con el proceso personal de esta mujer tan alegre y fuerte, “ella nos ha demostrado a todo el equipo su gran capacidad de adaptación y motivación frente a la mejora de algunos aspectos para poder mejorar sustancialmente su calidad de vida”.

A menos de cinco meses de finalizar este camino y junto a su pareja, que la acompaña en este renacer, expresó que “realmente vale la pena intentarlo, hay cosas que se nos han olvidado que son bonitas, como poder disfrutar de la vida, poder disfrutar de cosas chéveres, poder bailar, elevar una cometa o comerse una ensalada de frutas bien rica en una frutería”.

El apoyo psicosocial que ha recibido en la Comunidad de Vida El Rosario le ha permitido expresar mejor sus emociones, volver a soñar y confiar en sí misma. Hoy con una fuerte convicción envía un mensaje a quienes habitan las calles: “Démonos la oportunidad porque sí se puede, yo pensé que yo ya me quedaba así, ya no quería salir de las drogas porque me gustan mucho, pero no me gusta la vida en calle y creo que la vida en calle y la droga van de la mano”.

La vida de Darnelly está tomando un nuevo rumbo y la emoción con la que recalca su tranquilidad por haber tomado la decisión de dejar de habitar en calle la expresa eufóricamente al enfatizar: “La verdad estoy tan feliz de haber tomado la decisión y lo intenté y lo sigo intentando y quiero lograrlo, ¡sí se puede!, ¡Sí se puede!”

 

 

Desfile de modas y derroche de talentos de población en habitabilidad de calle durante festival

  • La Fundación Corazón Sobre Ruedas, el club de moteros Street Brothers y el Ejército Nacional se unieron para dar vida al Festival de Talentos por la Dignidad, realizado en la comunidad de vida El Camino.

 

Bogotá, D.C., octubre 24 de 2022. Luces, cámaras, acción; los ciudadanos y ciudadanas exhabitantes de calle de la comunidad de vida El Camino dejaron toda su energía y actitud en el Festival de Talentos por la Dignidad, realizado con el apoyo del club de moteros Street Brothers, la Fundación Corazón Sobre Ruedas y el Ejército Nacional.

La jornada contó con muestras de break dance, teatro, danza, desfile de modas con prendas en material reciclado diseñadas por los mismos participantes, además de un espacio para destacar y comercializar los emprendimientos de yogurt, maní, artesanías, alimentos, accesorios y muestras de arte de la población que hace parte de la comunidad.

“Hemos construido este festival de talentos enfocado en fortalecer las habilidades y capacidades de la población en habitabilidad de calle que está en proceso en la comunidad de vida El Camino. Estas actividades dignifican la vida de nuestros ciudadanos y ciudadanas y generan un aporte importante en sus procesos psicosociales y de desarrollo personal”, destacó Carlos Cardozo, subdirector para la Adultez de la Secretaría de Integración Social.

Por su parte, Juan Carlos Sánchez, directivo de la Fundación Corazón Sobre Ruedas y de la familia de moteros Street Brothers, resaltó: “Somos una comunidad de 5.000 moteros y trabajamos por la gente y para la gente. Estamos aquí porque creemos que en El Camino hay personas en rehabilitación que tienen toda la voluntad para salir adelante, por esta razón es justo apoyarlos y estar con ellos”.

Durante la jornada, este grupo de apoyo social hizo una entrega de prendas de vestir y elementos de aseo para el bienestar de la población habitante de calle.

Y ya lista para el desfile, con su traje de época, un tocado en su pelo y una sonrisa en su rostro, Paula Londoño, quien lleva su proceso desde hace ocho meses en El Camino, agradeció por este tipo de actividades: “Hasta ahora empecé a participar en esta clase de eventos porque no les veía sentido, pero esto termina de unir a las personas y nos demuestra que no es malo estar aquí”.

 

Comunidad de vida El Camino

A través de la Subdirección para la Adultez, la Secretaría de Integración Social atiende a ciudadanas y ciudadanos en habitabilidad de calle o en riesgo de estarlo. El programa ofrece servicios en distintas modalidades como hogares de paso, comunidades de vida, centros de autocuidado y atención en territorio.

En las comunidades de vida se realiza atención 24/7 y acompañamiento psicosocial para la deshabituación de la vida en calle en mayores de 29 años. Allí, los ciudadanos y ciudadanas que deciden seguir en proceso de recuperación, cuentan con un espacio para fortalecer sus hábitos saludables, rediseñar su proyecto de vida, recobrar sus redes familiares y formarse en oficios que les concedan la posibilidad de ser autónomos y alejarse definitivamente de la habitabilidad en calle.

Actualmente, la entidad cuenta con tres comunidades de vida: El Rosario, La Victoria y El Camino.

Habitantes y exhabitantes de calle visitan por primera vez un museo

 

 

  • Población en habitabilidad de calle, que hace parte de los servicios de la Secretaría de Integración Social, tiene acceso a la cultura y al arte a través del programa Museo Compartido de la sección educativa de los museos de arte del Banco de la República.

 

Bogotá, D.C., octubre 18 de 2022. “Hasta ahora es la primera vez que visito estos grandes museos. Quería conocer a las gordas de Botero y hoy, por medio de la fundación me dieron la oportunidad. Muy fascinante, muy elegante”.

Con estas palabras, Alex Rodrigo Walteros describe su visita al Museo Botero y el Museo de Arte Miguel Urrutia; como él, ya son más de 300 ciudadanos habitantes y exhabitantes de calle los que han participado en estos recorridos que promueve el Banco de la República en colaboración con la Secretaría de Integración Social.

                                                                            

Los Aparatos mágicos de Negret, la Custodia de la Iglesia de San Ignacio (La Lechuga), la obra Violencia de Obregón y los cientos de pinturas que se cruzan por los pasillos de la Manzana Cultural, atrapan los sentidos de cada uno de los ciudadanos habitantes de calle. Ellos pueden pasar minutos detallando las obras, se sumergen en su esencia y disfrutan viendo la vida y la realidad de Colombia a través del arte.

Hacen preguntas, dan sus aportes y se vinculan como cualquier turista curioso y amante de la cultura que se encuentra en cada rincón. Cuando ya se acerca la hora de partir, saben que su sueño es volver, ya no como grupo, sino por iniciativa propia; con algún familiar o amigo, y es que esta es la esencia de la actividad, que los ciudadanos y ciudadanas habitantes de calle se apropien del arte y la cultura puesta al servicio de todas las personas, sin distingo de raza, sexo, género o nivel social.

 

Colaboración Banco de la República e Integración Social

Es gracias a un trabajo articulado entre la Unidad de Artes y otras colecciones del Banco de la República y la Subdirección para la Adultez de la Secretaría de Integración Social, que desde el año 2019 se realiza este proceso de movilización ciudadana para que la población habitante y exhabitante de calle de las distintas modalidades y servicios de la Secretaría, realicen recorridos guiados por los museos que componen la Manzana Cultural del Banco de la República: Museo Botero, Museo de Arte Miguel Urrutia, Museo Casa de Moneda, Museo Casa Republicana, colecciones permanentes y exposiciones temporales.

“La importancia de tener estos proyectos conectados con habitabilidad en calle nos ha permitido construir de manera colectiva las estrategias de educación de los museos para aportar significativamente a los procesos y a las experiencias de vida de esta población”, destacó Isabel Cristina Cuellar, coordinadora de museos de arte del Banco de la República.

Por su parte, Yeison Gil, coordinador del Eje de Ampliación Capacidades y Generación de Oportunidades de la Subdirección para la Adultez, mencionó que “espacios como estos ayudan a fortalecer todo el proceso de atención y el desarrollo personal de nuestra población habitante de calle, además, le permite ser incluida en cualquier apuesta y escenario de ciudad”.

Los recorridos por los museos de la Manzana Cultural del Banco de la República continuarán realizándose, con el fin de romper las barreras que han tenido las poblaciones vulnerables para acceder a espacios de arte y cultura en la ciudad.

 

Atención a población habitante de calle en Bogotá

A través de la Subdirección para la Adultez, la Secretaría de Integración Social atiende a ciudadanas y ciudadanos en habitabilidad de calle o en riesgo de estarlo. El programa ofrece servicios en distintas modalidades como hogares de paso, comunidades de vida, centros de autocuidado y atención en territorio, con el fin de llevar la oferta de servicios para esta población.

 

 

 

La libreta militar, una puerta a las oportunidades para habitantes y exhabitantes de calle

 

  • 15 libretas militares fueron entregadas a los habitantes y exhabitantes de calle que reciben atención en la Comunidad de Vida El Camino.
  • Dicha unidad operativa cuenta con 110 cupos para la atención a ciudadanos y ciudadanas que adelantan procesos de inclusión social y superación de vida en calle.
  • La entidad proyecta continuar con la entrega de libretas, en las 13 unidades operativas, que la Secretaría Distrital de Integración Social tiene para la atención de esta población.

 

Bogotá, D.C., octubre 12 de 2022. 15 ciudadanos habitantes y exhabitantes de calle, participantes de los servicios de la Comunidad de Vida El Camino, recibieron sus libretas militares, gracias a una articulación interinstitucional realizada, entre la Secretaría Distrital de Integración Social y el Distrito No. 2 del Ejército Nacional de Colombia.

 

Edison Botia, coordinador de El Camino señaló: “Con la entrega de libretas militares podemos contribuir a sus proyectos de vida, y ampliar y mejorar las oportunidades de inclusión ocupacional”.

Por su parte, el mayor del Ejército, José Reiner Polanía, comandante del Distrito No. 2 afirmó: “Esta es una oportunidad grande, que brindamos por parte del comando de reclutamiento, con el fin de solucionar la situación militar de la población vulnerable, dándoles así la oportunidad para que puedan acceder cargos en entidades públicas y privadas”.

Mauricio Isaza egresó exitosamente de su proceso de superación de vida en calle en la comunidad de vida hace 3 meses, hoy recibió su libreta militar y señaló: “Estoy muy contento por haber recibido mi libreta militar y por haber recibido las oportunidades de una nueva inclusión social.  Soy egresado, estoy juicioso y contento con mi familia y con mi trabajo. Quiero decirles muchachos que sí se puede y para adelante”.

John Anderson Cardona es un bogotano de 47 años que, lleva un año en su proceso en la comunidad de vida, actualmente se encuentra avanzando en su vinculación laboral, al recibir su libreta militar afirmó: Estoy celebrando la entrega de mi libreta militar, este es un logro más en mi vida, pues nunca pensé poderla tener, pero gracias a Dios, a Integración Social y al Distrito No. 2 del Ejército Nacional de Colombia hoy la puedo tener”.

Actualmente, la Secretaría Distrital de Integración Social, trabaja conjuntamente con el Ejército Nacional de Colombia para continuar la entrega de libretas en las 13 unidades operativas que  tiene para la atención de esta población. 

 

 

Del callejón de la muerte a El Camino de su libertad

 

  • William Moncada fue habitante de calle por 30 años, a sus 56 encontró en Integración Social y la comunidad de vida El Camino las herramientas que impulsaron su transformación.

 

Bogotá, D.C., octubre 10 de 2022. “Vengo de un pasado triste, oscuro, bullicioso, de mentira y falsedad...” Con este poema, William Moncada inicia su historia, para él no hay otra forma, es a través de la poesía y la escritura que consigue narrar la desolación que vivió durante 30 años en las frías calles de Bogotá. 

Su colchón era el cemento, la basura su alimento y la droga la más infiel compañera que día a día dominaba su ansiedad. Ese era el mundo para él: no tenía salida, no encontraba solución. 

Fue desplazado por la violencia y en 1966 llegó a la capital en búsqueda de un nuevo plan. Lo que no sabía era que las drogas, empezando por la marihuana, hasta llegar al bazuco, lo llevarían a un callejón sin salida, llamado adicción. 

El tiempo y sus decisiones lo fueron dirigiendo a la extinta calle del Cartucho, donde se cruzó con las más grandes atrocidades, la muerte de cerca y una completa degradación. En su crónica Breve historia del barrio Santa Inés, William presenta la miseria que encontró: “Vi salir gente sin brazos, sin piernas, mutilados y muertos [...] También había personas muertas en vida por su decadencia física y moral”. 

Recorrió el callejón de la muerte, lo experimentó, pero a él no lo destruyó, para William había un camino distinto, una nueva oportunidad que abrió sus puertas en noviembre de 2012, cuando fue llevado a una Unidad Permanente de Justicia - UPJ- y un grupo de personas le presentó la posibilidad de iniciar un proceso de recuperación en la comunidad de vida El Camino, de la Secretaría de Integración Social.   

Cansado de las calles, William buscó un espacio en un Hogar de Paso Día y Noche, donde recibió alimento y una cama para iniciar la deshabituación de vida en calle. Allí se mantuvo por dos meses, y posteriormente fue dirigido a la comunidad de vida, donde rodeado de naturaleza y de profesionales dispuestos a ayudarle, vivió un proceso de nueve meses, que le permitió fortalecer sus hábitos saludables, empezar a rediseñar su proyecto de vida y desarrollar capacidades olvidadas como la escritura y la poesía, con las que descubrió un aliciente para su dolor y un medio para llevar a otros su mensaje de transformación. 

Estuvo en decadencia, pero de allí salió, a sus 57 años encontró la libertad. Aunque no fue fácil volver a la vida fuera de las calles, William se esforzó, se hizo merecedor de una mención de la Red Distrital de Bibliotecas Públicas -BiblioRed- por uno de sus relatos, y ha recibido múltiples reconocimientos por las letras con las que narra su historia y le da esperanza a quienes hoy es esfuerzan por dejar atrás las calles y la adicción. 

Ya han pasado cerca de ocho años, ahora trabaja en logística de seguridad y en sus tiempos libres sigue escribiendo, haciendo poesía y visitando los hogares de Integración Social, para decirle al mundo que las segundas oportunidades cambian vidas, y que, sin importar pasado, se puede abrir un nuevo capítulo, que le dé paso a un camino de libertad. 

 

Versos de William Moncada

Homenaje a la comunidad de vida El Camino

 

Eres mi hogar, donde hay reflexión

Tus parques y árboles conjugan un sentir de armonía, paz y felicidad

Para quienes vinimos aquí y tenemos ganas de triunfar

 

Dentro de esta selva de cemento, llena de perjuicios

Eres un oasis para aquellos que vivimos encerrados en nuestra propia soledad

Un manantial de sabiduría con ingredientes campestres […]

 

En poco tiempo me llenaste de triunfos

Gracias por darme tu albergue y esas ganas de vivir.

 

 

 

 

 

 

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