“Me convertí en un ‘gamincito’. No tenía a donde ir y muchas veces tampoco que comer”, aseguró Ricardo con voz entrecortada y apretando su bastón, ese que por cerca de 52 años lo ha acompañado y que le ha marcado la ruta a lo largo y ancho de la ciudad.

 

“Mi vida de una u otra manera está ligada a la Secretaría de Integración Social. En su momento, tras vivir ‘las duras y las maduras’, en la calle me acogió el entonces Bienestar Social y quedé en manos del padre Javier de Nicoló.  De allí logré pasar al Instituto Nacional de Ciegos  –INCI- donde pude estudiar e iniciar una nueva vida”, manifiestó Cruz.

 

“Desde hace unos 5 años atrás venía insistiendo para acceder a una ayuda.  Algunas veces me dijeron con tono burlón que no me daban el mercado porque si no veía, como podía cocinar los productos ignorando que cocino muy rico. Al menos eso dicen los que han probado mi sazón.  Cuando había perdido la esperanza fue esta administración  de ‘Bogotá Mejor Para Todos’ la que me abrió las puertas y tras una visita a lo profundo de mi soledad, me dieron el sí para acceder a los bonos de mercado por un valor de $125 mil pesos devolviéndome la dignidad”, dijo don Ricardo.      

 

Como don Ricardo, son 35 mil los beneficiarios que canjean su bono de $125 ó 250 mil pesos en los supermercados autorizados para ello, en donde pueden adquirir los 19 productos de la guía nutricional, una lista elaborada por nutricionistas profesionales, quienes garantizan el balance alimenticio necesario.  

 

“Gracias a esta ayuda no padezco hambre como la sufrí en mi niñez.  Para nadie es un secreto que a nosotros las personas invidentes no nos dan trabajo fácil.   Con el bono generalmente llevo arroz, aceite, chocolate, huevos, leche, frutas, verduras y carnes.  Estos productos me duran el mes”, indicó el señor Cruz, quien asistió con cerca de 100 personas algún tipo de discapacidad, a canjear los bonos por alimentos en el Jumbo de la carrera 30.

 

 

Don Ricardo recomendó a los demás beneficiarios utilizar bien el bono y tratar con cortesía a la  gente que facilita el proceso de canje de estos, desde los funcionarios, hasta los cajeros en los supermercados.  Adviritió que la clave para preparar los alimentos es consumir los alimentos bajitos de sal, grasa y azúcar para no generar problemas en la salud. 

 

Por su parte, el subsecretario de Integración Social, Richard Romero Raad, reiteró que el apoyo alimentario continúa por parte de la institución.  “Estamos reforzando desde la entidad el acompañamiento a los beneficiarios en el proceso de selección de alimentos, garantizando el acceso y libre elección de los productos a llevar.  El valor de los bonos canjeables por alimentos no será reducido ni tampoco disminuirá el número de cupos para beneficiarios”, aseguró.  

 

Romero agregó  que la entidad realizará controles periódicos en los puntos de canje para atender las inquietudes de los beneficiarios.  “Los participantes cuentan con más garantías para hacer efectivo el canje del bono; ya que se amplió el plazo de 15 días y se extendió el horario en los puntos establecidos.  

                     

Con este tipo de ejercicios Integración Social garantiza que los servicios que reciben sus participantes sean óptimos y cumpla con los más altos estándares de calidad.

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