• Comparsas, música y mucha alegría se vivió en el centro de eventos Compensar, en el marco de la celebración del mes de las personas mayores.
• 19 localidades de la ciudad se dieron cita para mostrar las capacidades y actitudes artísticas.
• Más afecto y menos abandono familiar, uno de los mensajes más recurrentes por parte de los asistentes.

 

Bogotá, D.C., agosto, 8 de 2022. En el mes del Envejecimiento y la Vejez, las personas mayores, a ritmo de carranga, comparsas y mucha música, celebraron la gran Fiesta Plateada para que le sean reconocidos sus derechos y a Enveje-Ser Sin Miedo al Abandono. 

Durante la fiesta se exhibieron pancartas alusivas a la dignidad en el envejecimiento y la vejez, así como el respecto y el afecto hacia esta población.     

Julián Moreno, subsecretario de la Secretaría Distrital de Integración Social manifestó: “Qué alegría es volver a verlos sonreír. Estamos aquí con todo nuestro grupo de personas mayores de la localidad de Barrios Unidos, con quienes empezamos junto con las otras 19 localidades de la ciudad a celebrar con la fiesta plateada nuestro Mes del Envejecimiento y la Vejez y reiteramos nuestro mensaje desde el afecto y cariño para las personas mayores de nuestra ciudad”. 

 

A su turno, María Conchita Ramírez, presidenta del Consejo Distrital de Sabios y Sabias, destacó que la celebración de la fiesta plateada es realmente una oportunidad muy linda de encuentro que se propicia desde la institucionalidad para la persona mayor. 

“Con esta experiencia que tenemos en el Consejo de Sabios, tenemos que demostrar al país y al mundo el gran valor y significado de la persona mayor. Me hace feliz pensar en dejar huella por el trabajo adelantado desde el consejo que presido en torno a los derechos de las personas mayores”, dijo la presidenta del Consejo de Sabios y Sabias. 

Rosalía Peñuela fue una de las participante de los servicios de la Secretaría de Integración Social que disfrutó ese ‘fiestón’, así denominó la celebración. “Soy una persona mayor, muy mayor, pero mis arrugas y mis canas me dan tanta alegría y tanta emoción, porque me demuestran que he vivido y soy feliz. Y todos los días de la vida celebro la vida porque puede ser el último día que viva”, aseguró. 

 

También, Gloria Hernández, otra participante, hizo una pausa en el baile para enviar el siguiente mensaje: “Eso es lo que nosotras tenemos que hacer, empoderarnos, la libertad, no solamente de ser mujer, sino de ser mayor. De tener unas canas que estamos orgullosas de tenerlas y de vivir la vida hasta donde Dios permita”. 

Finalmente, Sonia Tovar, subdirectora para la Vejez de la Secretaría de Integración Social sostuvo que “la vejez es una posibilidad para seguir ejerciendo todos los derechos realizando sueños, compartiendo. Nos quedan muchos desafíos para proteger los derechos de las personas mayores y fortalecer su política pública”.   

El evento sirvió, además, para propiciar ese encuentro entre las personas mayores desde sus potencialidades y capacidades a través de la música y la cultura, posibilitando el reencuentro y el fortalecimiento de las redes de apoyo para prevenir el abandono.