● Durante los meses de pandemia se ha mantenido el servicio. Ya se han beneficiado 67 personas.

● La Secretaría no solo se encarga de comprar los pasajes, también hace un acompañamiento una vez la persona está en su lugar de destino.

Bogotá, 25 de agosto de 2020. Yiseth Paola parecía no creerlo: estaba ya sentada en la Terminal y en minutos estaría a bordo de un bus, junto a sus cuatro hijos, rumbo a una vida en Cartagena y sin gastar un solo peso en tiquetes.

Ella es una de las beneficiarias de un programa de la Secretaría Distrital de Integración Social que desde hace más de tres décadas ofrece auxilios para pasajes intermunicipales a personas en situación de vulnerabilidad que están en Bogotá y que quieren viajar a ciudades en donde podrían estar en mejor situación.

 

Yiseth, de 27 años, llevaba ya ocho meses en la capital, después de tener que salir de Cartagena a finales del 2019 por una situación de maltrato intrafamiliar. Cuenta que terminando diciembre llegó a Bogotá junto con sus cuatro pequeños, el menor de 4 años y el mayor de 10. A su llegada a la ciudad empezó a vender verduras y con eso pagaba el arriendo de un apartamento en el barrio Villa Nelly, en la localidad de Kennedy.

 

Pero una suma de circunstancias llevaron a que perdiera su trabajo y que tuviera que entregar el sitio en donde vivía. La pandemia por el coronavirus la dejó sin ingresos fijos. Y la próxima demolición del edificio en donde está su apartamento la dejó sin techo.

A través de una vecina supo que existía este auxilio y, en la subdirección local de la localidad de Kennedy empezó su proceso para ser receptora del beneficio.

Apenas una semana después ya tenía tres cajas llenas con todas sus cosas, un maletín lleno de frutas, agua y comida para el camino y una lista de agradecimientos.

“Yo jamás había tenido apoyo, siempre he sido sola con mis niños, pero la Secretaría le puso corazón a mi situación, vio cómo estaba yo, cómo estaban mis hijos y con estos cinco pasajes llegaré tranquila a Cartagena, sin gastar un solo peso”, dijo unos minutos antes de subirse al bus que desde la Terminal Salitre de Bogotá la llevó a Cartagena.

Una ayuda que no para en pandemia

El auxilio que se ofrece a personas en situación de vulnerabilidad para que regresen a sus ciudades de origen o a la ciudad en donde tienen familia y amigos que los reciban no es nueva. El acuerdo con la Terminal de Transportes, de hecho, data de 1985.

Según explica Jorge Orlando Hérnandez, funcionario de la Secretaría de Integración Social encargado del convenio con la Terminal, antes de la emergencia sanitaria era común que en un día entre 5 y 7 personas viajaran con los tiquetes cubiertos por parte del Distrito. Así, en 2019 se cobijaron a 221 personas.

“Hace parte de la tranquilidad de las personas estar en donde quieren estar.Por eso la Secretaría de Integración proporciona este servicio como una manera de atender a las personas vulnerables de manera integral”, dice Xinia Navarro, secretaria distrital de Integración Social sobre este beneficio.

Y aunque desde que se inició la emergencia sanitaria causada por el coronavirus el despacho de buses desde la Terminal se ha disminuido, los auxilios por parte de la Secretaría se mantienen para las personas que cumplan con los requisitos y los requerimientos solicitados. De hecho, entre marzo y julio de este año ya se entregaron ayudas a 67 usuarios, entre ellos Yiseth Paola.

“Las personas que están en alto riesgo de vulnerabilidad pueden acceder a este beneficio. Pueden solicitar el apoyo a través de las alcaldías locales, pero nosotros tenemos convenios con el ICBF, la Policía Nacional, la Secretaría de Salud y la misma Terminal, para identificar a personas que requieran de esta ayuda”, añade Hernández.

El beneficio cobija también a personas que han venido a Bogotá a hacer diligencias y por las circunstancias se quedan sin dinero para los pasajes. En este caso, deben demostrar que están en una situación de vulnerabilidad y que tienen residencia permanente en otra ciudad.

Para las personas que ya viven en Bogotá, pero que igual que Yiseth Paola quieren irse a otro municipio, la Secretaría hace un barrido en bases de datos como el Sistema de Identificación de Registro de Beneficiarios (SIRBE) de la Secretaría Distrital de Integración Social, el Sisbén e incluso el Fosyga, para determinar su nivel de vulnerabilidad.

Lo que sigue es una entrevista con la persona que pide el servicio y, si es susceptible de recibirlo, los documentos se le trasladan a la Terminal, que determina qué empresa viaja a la ciudad a la que se solicita el traslado.

Pero la Secretaría no solo paga los tiquetes. El acompañamiento para los beneficiarios va hasta que llegan a su destino final. Eso implica que quienes piden esta ayuda deben demostrar que tienen un sitio al cual llegar después de dejar Bogotá.

“La idea no es que dejen Bogotá y nosotros ya nos desentendemos, no. Cada viajero debe entregar una carta de la persona que lo va a recibir a la ciudad a la que llegue, también una carta de la Junta de Acción Comunal de la zona en que se certifique que, en efecto, vive en esa ciudad. También pedimos que vayan a recoger a las personas cuando llegan desde Bogotá, para que no haya posibilidad de que queden deambulando en la calle”, agrega Hernández.

En el caso de Yiseth Paola, un amigo de la familia fue quien le abrió las puertas de su casa a ella y sus cuatro pequeños. Ella, después de 16 horas de viaje, y ya en Cartagena, llegó a su casa y allí inició esta nueva etapa. Se comunica con Jorge Orlando y le dice que extraña Bogotá, pero por ahora está concentrada en iniciar de nuevo su vida, con el impulso que le dio la Secretaría.

“La invitación a las personas que requieren este apoyo es que nos llamen, nos contacten, vayan a las subdirecciones locales de Integración Social para que puedan acceder a este servicio”, concluye la Secretaria Navarro.