Ciudadanos exhabitantes de calle entregaron kits escolares a niños, niñas y adolescentes

• Gracias a las acciones de corresponsabilidad social que adelantan los participantes de la Subdirección para la Adultez de la Secretaría Distrital de Integración Social, se están entregando material educativo a las familias más vulnerables.

• 286 kits escolares han sido entregados a niños y niñas de familias de ex habitantes de calle, recicladores y algunas fundaciones privadas.

• A través de los procesos de recuperación personal en los centros de atención de la Secretaría Distrital de Integración Social, 171 ex habitantes de calle adelantan sus estudios académicos en primaria y bachillerato.

Bogotá, D.C., 18 de marzo de 2021. Hablar de corresponsabilidad social no solo está en el lenguaje de las empresas o entidades a nivel nacional y distrital. Esta vez, ciudadanos y ciudadanas exhabitante de calle, que se encuentran en un proceso de dignificación y acompañamiento psicosocial de la Subdirección para la Adultez de la Secretaría Distrital de Integración Social (SDIS), motivan a niños, niñas y adolescentes a continuar con sus estudios, alejados de toda situación vulnerable que pueda hacer cambiar sus vidas.

Un grupo de participantes que, a través del programa ‘Círculos Preparatorios Integrales de Aprendizaje’ (CIPREIA) adelantan sus estudios en primaria y bachillerato, se unieron con la fundaciones ‘Kits Four Kits’ y la ‘Alegría de Vivir’ para entregar kits escolares a niños y niñas vinculados a organizaciones que trabajan por la garantía de sus derechos y, en especial a aquellas víctimas de violencia, hijos de recicladores o familias vulnerables que no tienen recursos suficientes para la compra de los útiles escolares.

Diego Alberto Orjuela, exhabitante de calle, desde los 12 años de edad fue víctima de violencia intrafamiliar, por ello se vio obligado a huir del seno de su hogar, habitando por muchos años la calle y en donde conoció las drogas.

De la mano del Padre Javier de Nicoló, intentó cambiar pero su adicción al consumo, como el mismo lo menciona, muy pocas veces le ayudó a alejarse de la droga y la habitabilidad en calle.

“Recibí el apoyo de la Tropa Social de Rescate que me tendió la mano y me ofreció un cambio de vida. Acepté vincularme a los servicios. Hoy estoy muy juicioso en mi proceso. Además, estoy muy contento porque después de casi 18 años estoy terminando mi bachillerato”, destaca Diego Alberto.

Adicional a los servicios integrales de escucha activa y jornadas de autocuidado para los habitantes de calle, el proceso ofrece herramientas para una inclusión social y laboral. En este caso, a través de un convenio con la Secretaría de Educación que ofrece un modelo de educación flexible en donde las y los ciudadanos exhabitantes de calle pueden validar sus estudios en primaria y bachillerato.

Diego Alberto y otros compañeros de estudio, aprovecharon un espacio entre las clases y sus procesos de recuperación para llevarle a niños y niñas elementos como lápices, cuadernos, colores y demás útiles necesarios para su formación educativa.

De acuerdo con Tatiana Ortiz García, coordinadora del Eje de ampliación de capacidades y generación de oportunidades de la Subdirección para la Adultez de la SDIS, “además del proceso de formación ahora fomentamos en los ciudadanos ex habitantes de calle temas de corresponsabilidad social, en donde podemos devolverle a la comunidad algunas acciones no solo en función sobre el cuidado del espacio público, sino en actividades que van dirigida a la comunidad, motivando a una trasformación social integral, en este caso particular, la entrega de kits escolares que motiven a otros y minimicen la deserción escolar”.

A la fecha, ya son 286 kits escolares los cuales han llegado a hogares vulnerables que incluyen familias con ex habitantes de calle, recicladores y algunas fundaciones. Para el primer trimestre del presente año, alrededor de 171 exhabitantes se encuentra adelantando sus estudios en primaria y bachillerato, llegando a ciudadanos no vinculados a los servicios y a aquellos que están en proceso de recuperación institucionalizados, para lo cual se adelantan un acompañamiento profesional en el cumplimiento de tareas para cada módulo de aprendizaje.

Se espera que para el mes de junio, 72 de ellos finalicen sus estudios de primaria y noveno grado, mientras que 21 ciudadanos se graduarán como bachilleres.