Nuevas masculinidades para prevenir la violencia intrafamiliar

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Más de 450 hombres de las localidades de Puente Aranda y Antonio Nariño reconocen que uno de los componentes más eficaces está en entender que hombres y mujeres tienen los mismos derechos.

Bogotá, D.C, 10 junio de 2020. Durante el aislamiento obligatorio debido al Covid-19 se han incrementado las llamadas de mujeres a la Línea Purpura para reportar violencia contra ellas. De acuerdo con la Secretaría Distrital de la Mujer, a mayo se han hecho 5.415 llamadas asociadas a los temas que maneja esta línea y 7.950 mensajes al chat de la entidad.

A la par con los servicios de acompañamiento familiar para estos casos reportados a través de las Comisarias de Familia, la Secretaría Distrital de Integración Social (SDIS) implementa estrategias locales para llegar a los hogares con un mensaje de reconciliación, cero machismo y violencia intrafamiliar.

En la Subdirección de Puente Aranda y Antonio Nariño, un grupo de hombres, padres de familia de los niños y niñas vinculados a los jardines infantiles, vienen trabajando en la resignificación del concepto de masculinidades, llevando a la práctica acciones de respeto y equidad que fortalecen escenarios de prevención de maltrato hacia la mujer y de la violencia intrafamiliar.
 
 

Raúl Suárez Tarazona, psicólogo de la Subdirección Local de Puente Aranda, es el promotor de la Escuela de Nuevas Masculinidades ´Mayra Barahona Rodríguez´, a través de la cual se desarrolla un proceso de formación con los padres de los jardines infantiles. Se hace a partir de la socialización y el desarrollo de módulos de aprendizaje enfocados en promover masculinidades no violentas, comprometidas con los temas de crianza y las dinámicas domésticas.

Está escuela, surge en respuesta al feminicidio de Mayra Barahona, madre de un niño de 2 años beneficiario del jardín infantil Bochica, en la localidad de Puente Aranda- Él fue el único testigo del feminicidio ocurrido en el 2016.

“Los hombres también tenemos cosas buenas que repensar, reflexionar y resignificar muchas acciones de las que hemos venido haciendo y que la sociedad nos ha establecido como privilegios frente a las mujeres”, afirma Suárez Tarazona.

A lo largo de sus cinco años de creación, la Escuela ha contado con la participación de más de 450 hombres residentes en las localidades de Puente Aranda y Antonio Nariño, quienes reconocen que uno de los componentes más eficaces para prevenir el maltrato está en reconocer que hombres y mujeres son iguales y poseen los mismos derechos.

“Se trata de compartir las responsabilidades de la casa con nuestras parejas, compartir todo que hay que hacer, convertirnos en un equipo de trabajo para salir adelante en el hogar, para sacar adelante nuestros hijos”, afirma John Forero, padre de un niño beneficiario del jardín infantil ‘Aserrín Aserrán’, quien participa de la escuela hace aproximadamente un año. Con su ejemplo procura que su hijo respete y trate equitativamente a las mujeres.

Son en total 1.972 hogares atendidos en los 16 jardines infantiles de la Subdirección Local de Puente Aranda y Antonio Nariño, con los cuales, se continuará posicionando la corresponsabilidad de los hombres en el ejercicio de la crianza y en el involucramiento en los quehaceres domésticos, dando paso a nuevas masculinidades liberadoras y pacíficas que marquen la diferencia para lograr transformar, no solo los imaginarios tradicionales, sino también transformaciones sociales y culturales.
 

 
 
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