Dos niños con discapacidad recibieron obsequio de universitarios para mejorar su calidad de vida

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Bogotá, julio 27 de 2018. Dos pequeños que pertenecen al jardín infantil ‘San Luis’, de la Secretaría Social, de la localidad de Chapinero, recibieron, gracias a la articulación de la Fundación Universitaria Iberoamericana y la Universidad Central, ayudas técnicas que contribuyen a su inclusión y participación con otros niños y personas a su alrededor.

Y es que llegar a la entrega de estas ayudas técnicas, en el auditorio de la Fundación Universitaria Iberoamericana, es algo emocionante, ver el rostro de Xiomara y Jerónimo es realmente mágico, hacen recordarle al mundo que a pesar de sus discapacidades son más felices que cualquier otra persona que lo tenga todo.

Julieth Xiomara Garzón Hurtado, es una niña de 5 años de edad con un diagnóstico médico de mucopolisacaridosis y síndrome de canavan, para una edad motora de 7 a 9 meses en relación con la edad cronológica. Posee también una condición especial que es la hipotonía generalizada que no le permite realizar ni adoptar posturas para lograr su independencia. En las alteraciones de sensibilidad tiene sensibilidad táctil, puesto que no tolera algunas texturas.

Xiomara tiene también una discrepancia entre longitudes, es decir una extremidad es más larga que la otra, esto genera inestabilidad en ella. Esta pequeña vive con su papá, mamá y sus hermanos, quienes han sido un gran apoyo para ella. Desde hace 2 años asisten al jardín infantil y reciben los servicios de la Secretaria Distrital de Integración Social (SDIS).

Esta niña hermosa, con rostro angelical y una mirada dulce que combina perfectamente con sus ojos color azul, ha tenido un proceso admirable desde que llegó a las instalaciones en el jardín, siempre contó con la ayuda de los agentes educativos, educadora especial, familias y hasta referentes de proyecto que la ayudaron poco a poco a mejorar su condición corporal y su independencia.

Jóvenes estudiantes de la fundación universitaria Iberoamericana y Universidad Central diseñaron para ella especialmente un asistente o entrenador para marcha que la ayudara a caminar por sí sola. Aunque Xiomara fue un poco alejada de su nuevo regalo por momentos daba a conocer una linda sonrisa que para muchos ya era más que suficiente.

Por otro lado, está niño Jerónimo Andrés Ramírez Mendoza, un pequeño que enamora con su mirada. Tiene 2 años de edad y su diagnóstico médico es parálisis cerebral, con una característica específica que es el retraso en el desarrollo motor, es decir que las actividades que hace de manera independiente estarían enmarcadas de un niño de 2 a 4 meses. Jerónimo no puede sentarse por sí solo o mantener alguna posición, tiene más movilidad con su lado derecho. Sin embargo, esto no ha sido impedimento ya que logra comunicarse de manera específica cuando le gusta algo o no, su sonrisa muestra aprobación aunque tiene otros sistemas de comunicación que ha logrado crear junto a su madre la señora Julie Mendoza, una madre que a pesar de los obstáculos que le ha puesto la vida ha sacado a su pequeño adelante, le ha tocado como ella misma dice “llevarlo de un lado para otro”, ya que donde ella está, el niño también. Jerónimo se encuentra vinculado a los servicios de la SDIS desde hace muy poco, lleva 5 meses en el Jardín San Luis y a pesar de su corto periodo inclusivo se evidencian los avances significativos a su desarrollo, sobre todo en las dimensiones cognitiva y personal social. 

Cuando Jerónimo recibió su ayuda técnica, fue muy emocionante, primero lo miró, luego lo examinó y cuando se dio cuenta que podía moverse de un lado a otro con él, inicio exploración ayudándose con las extremidades inferiores para ir de un punto del salón a otro, sonriendo y mirando a las personas presentes en signo de agradecimiento.

Estos dos niños dieron una muestra muy grande de valentía pero sus mamas también fueron protagonistas de esta historia, dos mujeres guerreras que agradecieron con lágrimas la hermosa gestión que hicieron los estudiantes con sus hijos, ya que pensaron que solo se iba a quedar en promesas.

Desde la subdirección Local de Integración Social (SLIS) de Chapinero agradecemos de todo corazón el trabajo conjunto de los estudiantes de práctica de Ingeniería Mecánica de la Universidad Central y los estudiantes de fisioterapia de la Fundación Universitaria Iberoamericana que cumplían con sus prácticas en la SLIS por la entrega de las ayudas técnicas a los niños de la localidad y por ser parte de esta labor tan linda que día a día hace ser a esta ciudad, una ‘Bogotá Mejor Para Todos’.
 

 
 
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