• El Centro de Atención y Desarrollo de Capacidades para Mujeres Habitantes de Calle de la localidad de San Cristóbal reúne a nueve mujeres emprendedoras que suplen los requerimientos de ‘La Piñatería’ y fortalecen sus habilidades para una inclusión laboral. 

• Son 82 mujeres que decidieron dejar las calles y están hoy en procesos de emprendimientos, laborales y de formación.

Bogotá, D.C., mayo 10 de 2022. La Piñatería es el emprendimiento en el que participan mujeres que estuvieron habitando las calles de la localidad de San Cristóbal y, ahora, ponen a prueba sus destrezas y sus manos para salir adelante en un proceso de inclusión socio laboral. 

Sobre lo que ha significado esta nueva oportunidad en la vida, Luz Dary Quevedo, quien cumple seis meses en el Centro de Atención y Desarrollo de Capacidades para Mujeres Habitantes de Calle de en San Cristóbal, expresó que “me han ayudado mucho, trabajo en la piñatería y estoy estudiando porque quiero validar la primaria en Círculos Preparatorios Integrales de Aprendizaje (CIPREIA), quiero tener un nuevo rumbo en mi vida”. 

Sandra Milena Meléndez, terapeuta ocupacional de este Centro explicó la forma como se viene desarrollando estos acercamientos con la empresa Distribuciones Ponce y dijo que “se unieron para darles trabajo a estas mujeres, volviéndose un satélite. Este proyecto inicia en noviembre de 2021 con las nueve mujeres vinculadas. Ellas se sienten útiles, deseamos que sus habilidades las pongas en práctica cuando salgan de acá”. 

Cada día, a las 5:30 a.m. Luz Dary y sus compañeras de aventuras y, ahora, de sueños saben que en sus manos está la tarea de empacar cucharas, arreglar servilletas y adornos solicitados por la empresa aliada para sus eventos. 

Para Mercedes, una mujer de 62 años y exhabitante de calle, este trabajo es una nueva oportunidad de salir adelante y subraya que “mantenemos la mente ocupada, aprendemos que la vida continua y podemos salir adelante, para mí la piñatería es una gran oportunidad”. 

En total son 82 mujeres que a diario intercambian historias, sentimientos y recuerdos de sus familias en el Centro de Atención y Desarrollo de Capacidades para Mujeres Habitantes de Calle, espacio en el que son motivadas para emprender diferentes actividades, como la de ‘El Circulo’ un momento de dialogo y amistad entre pares. 

En las tardes, los talleres de plantas y manualidades mantienen la atención de estas mujeres, mientras que algunas están vinculadas a los cursos de capacitación y de formación con el SENA, validación de la primaria y bachillerato con la generación de oportunidades y a los cursos espirituales.