• Los cursos del CDC Arborizadora Alta le han permitido a Nazly potenciar sus conocimientos para sacar adelante su emprendimiento de confección de ropa deportiva.

• La canasta alimentaria para la población afrodescendiente fue de gran ayuda para esta beneficiaria de los servicios de Integración Social recién llegó a Bogotá.

Bogotá D.C., 6 de julio de 2021. Nazly es una mujer emprendedora, amorosa con dos hijos y orgullosa de ser afrodescendiente. Llegó a Bogotá hace varios años huyéndole al conflicto armado y en búsqueda de un futuro comprometedor para su familia.

Viviendo en la capital, a través de una amiga se enteró de los servicios sociales de la Secretaría Distrital de Integración Social, ella y su familia se encontraban en inseguridad alimentaria, por ello pudo acceder a la canasta básica para hogares Afro.

La canasta básica para hogares afrocolombianos contiene alimentos tradicionales como el coco, el chontaduro, huevos, tubérculos rescatando su cultura, tradiciones y hábitos nutricionales.

“En Ciudad Bolívar entregamos cada mes 175 canastas básicas de alimentación a la población afrocolombiana y también entregamos 121 a hogares de la ruralidad, a través del servicio denominado un “Compromiso por una Alimentación Integral en Bogotá”, como respuesta social a las familias vulnerables con enfoque diferencial”, señala Óscar Sierra, subdirector Local de Ciudad Bolívar.

Nazly logró conseguir un empleo como operaria de maquina plana. Los primeros días realizaba actividades de control de calidad como revisar las costuras, los botones y cremalleras. Cuando sus compañeras cosían, disimuladamente miraba para ir aprendiendo las técnicas.

Sin importar su discapacidad en uno de sus ojos, trabajó durante un año y así adquirió experiencia en costura, control de calidad, diseño de prendas, elaboración de moldes, compra y selección de materia prima.

Con esa experiencia decidió inscribirse en el Centro de Desarrollo Comunitario CDC Arborizadora Alta para cualificarse en cursos de lencería para el hogar, certificado por el Sena. Ahora, gracias a los servicios del CDC, esta mujer trabaja en su propio emprendimiento dedicado a la fabricación de ropa deportiva.

Nazly asegura que, “uno a veces piensa que las cosas no se pueden lograr, pero con esfuerzo, empeño y mucho amor hay que proyectarse, hay que tener la idea de echar para adelante, por amor a los hijos que son nuestro motor. La canasta afro fue el impulso. Lo que ahorro en alimento es lo que invierto en mi proyecto”.

Actualmente, con la ayuda de sus hijos comercializa las prendas deportivas en las redes sociales de Instagram (Naslysilla Rivas Mosquera) y Facebook (confecciones serias) en Bogotá, Medellín, Cali y Pereira.

Gracias al apoyo nutricional y a los cursos del Centro de Desarrollo Comunitario de la Secretaría Distrital de Integración Social, ella puede invertir el dinero que antes presupuestaba para mercado en materiales para su emprendimiento.

Al igual, con la capacitación en lencería aprendió el uso de máquina plana, diseño de prendas y elaboración de moldes, logrando comercializar, no solo ropa deportiva, sino chaquetas para hombres, mujeres y niños.