Bogotá, diciembre 11 de 2021. En la madrugada del miércoles 8 de diciembre, unas pataditas cariñosas al interior de la barriga de Paola Quiñonez la despertaron de repente en una gélida esquina en la localidad de Chapinero. Para esta mujer afro en avanzado estado de gestación, estas pataditas eran una señal inequívoca de tomar la decisión de abandonar las calles tras 20 años de permanencia.
“Miren, se está moviendo, se está moviendo”, le dice Paola a los jóvenes de la Tropa Social, quienes se acercaron con una bebida caliente y la invitaron a acogerse a los servicios que ofrece a la Secretaría de Integración Social a personas que como ella que se encuentranhabitando las calles de la ciudad.
Junto al grupo de troperos estaba Astrid Torres, una mujer fundamental en la vida de Paola, ellas por cosas del destino se conocieron en el barrio San Bernardo. Fue así como Astrid y Paola compartieron la rudeza de vivir en la calle, hasta que Astrid decidió aceptar la ayuda de la entidad, desintoxicarse y vincularse al equipo de la Secretaría de Integración Social que recorre las calles brindando afecto a los ´huéspedes’ de la calle.
“Yo quiero que Paola pueda tener la fuerza de voluntad que yo tuve y pueda salir definitivamente de las calles, más ahora que está por nacer Ayleen, una razón más que especial para rehabilitarse y salir adelante”, contó Astrid.
Tomada de la mano de su inseparable amiga, Paola aborda el vehículo que la traslada al Centro de Mujeres que han habitado las calles. Allí es recibida con afecto por el equipo interdisciplinario de profesionales que atiende el lugar.
Luego de tomar una ducha y conocer su habitación, Paola es valorada en la enfermería del centro en donde le toman sus signos vitales, peso y talla. Allí mismo se activa la ruta con el Hospital Materno Infantil para poder valorar su estado de embarazo y brindar todo el soporte necesario para la llegada al mundo de Ayleen.
Por lo pronto Paola tendrá una comida y cama digna junto a otras 89 mujeres que como ella habitaron las calles y buscan en un espacio adecuado dejar definitivamente la pesadilla del consumo y la habitabilidad en calle.
Daniel Mora, subdirector para la Adultez de la Secretaría de Integración Social ratifica que se trabaja día y noche para rescatar a las personas que viven el flagelo del consumo y la habitabilidad en calle.
“Nuestro equipo tiene un lema ya institucionalizado, llueva, truene o haga sol, salimos a las calles a recorrer los canales, andenes, parques y cualquier zona de la ciudad para atender a las personas que habitan las calles y brindarles nuestros servicios, si los aceptan de manera voluntaria. Aquí insistimos, persistimos y nunca desistimos”, concluyó el funcionario.
Centro Mujeres Habitantes de Calle
El centro está ubicado en la localidad de San Cristóbal en la carrera 8ª #5-25 sur, barrio Villa Javier. Allí se presta un servicio de acogida temporal (habitación) que incluye apoyo psicosocial, activación de rutas en salud y atención frente a violencias contra ciudadanas habitantes de calle. El lugar brinda 5 servicios de alimentación diario, adicionalmente se brindan procesos de desarrollo de capacidades.
