- Se trata del Servicio Cuidado Transitorio en Bosa, dirigido a las personas mayores que carecen de ingresos, de algún tipo de pensión o de sus redes de apoyo.
- El testimonio de Ramiro, un beneficiario de esta modalidad, sirvió para que la visita del Comando Nocturno tomara el pulso de la calidad en los servicios.
- En lo corrido de esta administración, 1.387 personas mayores han sido atendidas en los cinco centros de cuidado transitorio de la ciudad.
- Apoyo psicosocial, asesoría para el acceso a servicios y rutas para la garantía de sus derechos, alimentación balanceada, higiene personal y actividades pedagógicas son algunas de las atenciones que reciben los participantes.
Bogotá, D.C, febrero 6 de 2022. Diferente a la canción “No hay Cama Pa’ tanta Gente”, aquí en El Centro de Cuidado Transitorio Antonia Santos en Bosa, Ramiro Arango Orozco, uno de los 62 beneficiaros de este servicio social, sí encontró un espacio con calor de hogar. “Es la primera vez que utilizo los servicios de Integración Social y para mí ha sido una sorpresa encontrar estos lugares tan maravillosos para nosotros los que necesitamos y buscamos donde dormir”.
Este centro es uno de los cinco espacios similares que funcionan en las localidades de Puente Aranda, donde operan dos, Los Mártires y Rafael Uribe Uribe, en los que la Secretaría de Integración Social ofrece a las personas mayores sitios para pasar sus noches, cenar, compartir y desayunar dignamente.
Y para verificar que la atención a las personas mayores de 60 años en riesgo de habitar la calle, como es el caso de Ramiro, esté enmarcada en los parámetros de calidad y calidez, un equipo humano de las secretarías de Integración Social y de Gobierno activaron, el pasado 3 de febrero, el Comando Nocturno y visitaron el Centro Transitorio de Bosa.
Allí, Ramiro Arango Orozco, con su mejor actitud sirvió de anfitrión mientras se hacia el recorrido por las instalaciones. “Esto es una bendición el servicio es extraordinario, la atención de los funcionarios, la cocina, los profesionales es increíble. Yo creo que en nuestra casa nunca nos atendieron tan bien, en mi opinión se siente el amor y afecto, no hay ninguna razón para uno quejarse de un servicio de esta naturaleza”, expresó.
Los centros de cuidado transitorio son espacios comunitarios en los que se fortalece la autonomía y capacidades de las personas mayores para que tengan una vejez digna y activa. Estos sitios promueven el mejoramiento de la calidad de vida y el desarrollo de los territorios sociales, de acuerdo con sus particularidades.
Minimizar riesgo
De acuerdo con las estadísticas, un total de 1.387 personas mayores han sido atendidas bajo esta administración. Para este 2023, los cinco centros reforzarán la atención transitoria a esta población en riesgo o situación de habitabilidad en calle con la promoción de acciones de autocuidado y dignificación, minimizando los daños asociados a la vida en calle.
Natalia Poveda, profesora de artes de este Centro de Cuidado Transitorio, aseguró: “Yo hago parte del equipo de artes del servicio del Centro de Cuidado Transitoria Antonia santos; las actividades están centradas en actividades lúdicas y artísticas para las personas mayores, articulamos con diferentes entidades, museos, bibliotecas, entidades privadas”.
Añadió que durante la estadía de los beneficiarios se potencian sus intereses y habilidades, e incluso indició que se cuenta con un grupo de danza con el que se viene trabajando desde hace un tiempo para montar diversas coreografías con base en el folclor nacional.
Destacó, particularmente, el caso de Marina, una participante del grupo que con las actividades artísticas superó su timidez. “En este grupo se han visto procesos muy lindos de algunas de las personas mayores que participa; hay una señora en particular que se llama Marina López, siempre ha tenido problemas para socializar, ella sentía rechazo al principio, miedo al contacto físico, al inicio se acercó por curiosidad, quiso participar del proyecto y ha tenido diversas etapas en las que ha podido superar poco a poco estás limitaciones”, expresó Natalia, en su diálogo con el equipo que visitó en la noche este Centro de la localidad de Bosa.
“Generamos sentido de apropiación y compromiso frente a las actividades que se proponen en el servicio con las personas mayores, trabajamos partiendo desde los gustos y los intereses de ellos”, concluyó la profesora de artes.
Un servicio integral
Con este tipo de estrategias, la Secretaria Distrital de Integración Social ratifica su compromiso de fortalecer la atención a la población más vulnerable de la ciudad, con programas integrales que minimicen los riesgo asociados al fenómeno de habitabilidad de calle de las persona mayores de 60 años.
Los participantes gozan de los siguientes servicios:
- Alojamiento confortable y seguro
- Componente alimentario con calidad y oportunidad
- Aseo personal.
- Acompañamiento interdisciplinario.
- Promoción de buenas prácticas y hábitos saludables
- Orientación y ofertas de servicios sociales.
- Activación de rutas en caso de vulneración de derechos
- Participación en procesos ocupacionales y de desarrollo humano