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En una visita liderada por la alcaldesa Claudia López y la secretaria de Integración Social, Xinia Navarro, el equipo de troperos entregó 250 raciones de comida caliente a población que se encuentra por debajo de la línea de la pobreza en el barrio Las Cruces.
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Gracias a las cocinas móviles, la población pobre y vulnerable está recibiendo comida caliente para suplir sus necesidades básicas de alimentación y bienestar.
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En esta ocasión se beneficiaron cachivacheros, zorreros, vendedores ambulantes, población dedicada a actividades sexuales pagas, ropavejeros, vendedores ambulantes, paga diarios, entre otros.
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Se dispone de 8.000 raciones diarias de comida caliente que se entregan, según necesidad reportada por cada localidad
En el emblemático Parque del barrio Las Cruces, la Tropa Social Alimentaria acompañada de la alcaldesa Mayor Claudia López y la secretaria de Integración Social Xinia Navarro, entregó 250 raciones de comida caliente de las 8.000 que dispone diariamente para suplir las necesidades básicas de alimentación de la población pobre y vulnerable de la ciudad.
Este nuevo programa, dirigido a personas ubicadas por debajo de la línea de pobreza extrema como cachivacheros, zorreros, vendedores ambulantes, población dedicada a actividades sexuales pagas, ropavejeros, vendedores ambulantes y paga diarios, tiene como propósito cubrir hasta el 25 % de energía y nutrientes requeridos por una persona, según normatividad nacional de nutrición.
La secretaria de Integración Social, Xinia Navarro afirmó sobre esta estrategia que “somos más de 10.000 personas que conformamos la Tropa Social alimentaria de la alcaldesa Claudia López, y nos articulamos con las otras entidades, porque la tropa es el modelo de atención en donde el Estado acerca sus servicios a la comunidad”.
“Hemos caracterizado más de 700.000 hogares, de los cuales la tropa ha ido a visitar puerta a puerta a 110.000, atendiendo las alertas en un 45 % y en calle, además hemos caracterizado 30.000 personas de pobreza extrema y hemos entregado 27.000 raciones de comida. Hemos crecido en servicios y en unidades operativas”, aseguró la funcionaria.
Por su parte, Boris Flomin, director de Nutrición y Abastecimiento de la Secretaría de Integración Social indicó que “nos complace contribuir con la seguridad alimentaria de las familias en Bogotá, aportando el 40 % de las necesidades de energía y nutrientes diarios de una persona, a través de las cocinas móviles”.
Para los usuarios de la unidad móvil, el agradecimiento es inmenso por haber recibido los alimentos. Por ejemplo, don Antonio Nieto, vendedor de helados de la localidad de Santa Fe, recibió su ración de comida caliente de la unidad móvil. “Estoy muy agradecido, los alimentos que recibo son una bendición”.
Por otro lado, Rodrigo Felipe Sierra, reciclador, dice que se siente agradecido con la alcaldía por el alimento. “Nos dieron un almuerzo, hice una fila y recibí con mucha alegría esta comida que está rica y saludable”.
Los comedores comunitarios – cocinas populares se convierten también en unidades móviles que atienden a la población que lo requiere con un servicio puerta a puerta poniéndole la cara a la pobreza extrema y buscando mecanismos para garantizar la seguridad alimentaria en Bogotá.
“El nuevo tráiler social llega a los parques, calles, a los sitios donde están sin esperanza. El equipo de troperos llega ahí, a brindarles una sopa, a decirles: ‘Ánimo, aquí estamos, comen en este momento y luego nos vamos a nuestros servicios’. La meta que tenemos en Integración es llegar a un millón de beneficiarios en estos cuatro años, ya vamos en 600.000, hemos crecido con mucha rapidez y el rescate social nos va a permitir aumentar cobertura rápido”, concluyó la secretaria de Integración Social.
