Siendo muy joven, José adelantó estudios de cocina y coctelería. Trabajó con importantes cadenas hoteleras, vivía con su familia y fue entonces, en su mejor momento, cuando un día de “arrebato y locura” tomó la decisión de “probar y experimentar” una sustancia psicoactiva, sin imaginar que se sumergiría en esta por años.

 

“Yo empecé a consumir marihuana y bazuco cada 8 días. Luego día de por medio y así hasta que ya todo lo que conseguía honradamente en mi trabajo, lo invertía en la droga”, cuenta don José Olinto.

 

Cuando la droga se convirtió en un vicio sin límites, José dejó su trabajo y familia para sumergirse en el oscuro mundo delictivo de la droga y las calles donde el abandono y deterioro se empezó a evidenciar en su cuerpo.

 

“Cuando uno está consumiendo no le importa en dónde duerme ni cómo se viste. Ya no piensa sino en solo rebuscarse para consumir, porque los expendedores al principio le regalan a uno un poquito mientras lo envician. Después toca pagar de una u otra forma,  ese es su negocio”, afirma Don José Olinto.

 

Una de las etapas más críticas que este hombre de 60 años vivió en las calles fue cuando una buseta lo arrolló en el centro de la ciudad, donde normalmente delinquía para conseguir droga y algo de alimento para sobrevivir.

 

“Me fracturé tibia y peroné. Por eso mi problema al caminar. Duré casi dos años con un yeso lo que me ayudó para dejar de robar y aproveché para empezar a mendigar, pedir plata en la calle y vivir de lo que la gente me daba”, indicó.

 

“La vida en la calle es muy dura. No todos son drogadictos. Algunos son recicladores o sencillamente se quedaron solos en la vida y decidieron deambular sin rumbo”, manifiesta Don José Olinto,  quien agrega que en las calles pudo conocer desde aviadores, ingenieros y arquitectos, hasta famosas estrellas de la televisión y la farándula. “El problema de la droga toca a todas las clases sociales”, sentencia.   

 

El proceso de recuperación no es fácil ya que influyen factores, físicos, sociales y emocionales que sólo con la disposición y apoyo de programas integrales se puede salir de esta situación.

 

 “Desafortunadamente hay muchos centros de garaje que aparentemente buscan rehabilitar al habitante de calle, pero lo que hacen es explotarlo para generar ingresos. Además, no cuentan con personas profesionales, no tienen terapeutas ni psicólogos.

 

Reclutan personas y exigen una cuota diaria para sostener sus programas”,  indica Don José Olinto, quien no recuerda las veces que asistió fallidamente a estos centros buscando ayuda.

 

 Actualmente en Bogotá, los habitantes de calle pueden acceder a la atención integral que ofrece el Distrito en siete centros (hogares de paso, centros de atención transitoria y comunidades de vida).

 

 “Tuve la oportunidad de asistir a un centro de acogida dos meses. Fui evaluado por un equipo profesional, luego trasladado al centro ‘El Camino’ donde realicé 4 ciclos de rehabilitación. Estoy ya en el proceso final de resocialización y vida productiva. Allí tengo una cama digna. Este lugar es una universidad para la recuperación, estoy en el proceso de ruta laboral para ingresar a la vida social muy pronto. Soy un mayor activo y funcional que quiero empezar de nuevo y creo que nunca es tarde”

 

 El deseo de este hombre mayor es contactar a su familia. Resarcir el daño e intentar recuperar en algo el tiempo perdido. “Me gustaría saber de mi familia. No para ser una carga, porque yo nunca les ofrecí nada. Soy consciente que hace mucho tiempo me desvinculé de ellos y les hice daño. No busco que sean mi red de apoyo, quiero reencontrarlos y decirles que lo logré, pues hace más de 20 años no los veo”. Sus ojos se encharcan. Aún le duele su familia.

 

Para don José Olinto vivir en las calles tiene tres destinos: “el hospital, la cárcel o el cementerio”. Por esto hace una invitación a los que con cariño llama compañeros de dolor.  “La lucha es fuerte. No es de la noche a la mañana, pero si es una decisión personal. No depende de una entidad o de un promotor, ellos brindan las herramientas pero somos nosotros los que debemos tomarlas y apropiarnos de estas para salir del problema.

 

Hay equipos sensibilizando ofreciendo una  oportunidad de cambio para reintegrarnos como personas útiles a la sociedad. Hay que pararnos, poner los pies en la tierra y reconocer que la solución está al alcance de nuestra mano”, finaliza seguro de sí mismo. Sabe que esta vez lo logró y que le queda mucho por vivir en su etapa de persona mayor.   

 

 

 

 Más de 300 personas mayores se darán cita el fin de semana para participar con sus familias del festival mayor que contará con actividades de promoción saludable, recreodeportivas, culturales e intergeneracionales.

 

 La jornada dará inicio con unos aeróbicos dirigidos donde los participantes podrán disfrutar de un espacio de actividad física para ejercitarse y demostrar que la edad no es impedimento para vivir como se quiere.

 

 De otra parte, la Secretaría de Integración Social, a través de la Subdirección para la Vejez, hará un reconocimiento a las personas mayores que se distinguen por desarrollar actividades y/o programas que benefician a la población mayor de la ciudad.

 

 Por último, en una colorida comparsa,  los mayores mostraran sus mejores dotes artísticos junto a los profesionales del Centro de Protección con quienes adelantarán una presentación de canto, danza y comedia.

 

 Es así como en la ‘Bogotá Mejor para Todos’ se promueven espacios de reflexión y sensibilización para desarrollar en la población mayor una vejez activa digna y feliz.

 

 

 

 

 

 

 

“Este reconocimiento es un acto de honra a los mayores a su experiencia y saber, además muestra el compromiso de trabajo de la administración para que las personas mayores de la ciudad tengan una vejez, digna activa y feliz”, manifestó la secretaria de Integración Social, María Consuelo Araújo Castro. 

 

La mención simbólica busca resaltar la labor de los mayores que con sus acciones valerosas, grandes, pequeñas y significativas en el ejercicio del cuidado, promueven relaciones de intercambio intergeneracional y aúnan esfuerzos para alcanzar una ciudad más incluyente y respetuosa con la vejez.

 

“He dedicado gran parte de mi vida a la educación y a divulgar el folclor, soy cuidador de nuestros tesoros artísticos y culturales en Fontibón y en la ciudad. Estoy muy contento de que reconozcan mi labor, estoy muy agradecido por esto”, afirmó José Jesús Castro, persona mayor de 72 años.  

 

Por su parte, Aura Cecilia Rodríguez, quien vive en Kennedy señaló que: “Soy cuidadora del Medio Ambiente. Tengo 69 años y me gusta trabajar la agricultura urbana, porque creo que es un legado que le debemos dejar a las futuras generaciones, es una responsabilidad ambiental preservar la vida y la edad no puede ser un obstáculo para servir”. 

 

Al rendir un homenaje a las personas mayores que con sus aportes y experiencia contribuyen a alcanzar una Bogotá Mejor Para Todos, la administración distrital reconoce los aportes invaluables de la población mayor en la construcción de ciudad y ratifica su compromiso de fortalecer espacios que promuevan un envejecimiento activo, digno y feliz. 

 

“Los mayores nos enseñan y nos regalan su conocimiento. Envejecer es seguir siendo y creciendo, todos estamos en proceso de envejecimiento desde que nacemos y por eso debemos vivir en todas las etapas de la vida de manera plena y consiente de que cada uno de nuestros actos repercute en alcanzar una vejez activa, productiva y participativa”, reflexionó la secretaria Araújo Castro en la entrega de los reconocimientos. 

 

¿Qué son las personas mayores cuidadoras?

 

Son aquellos individuos que con sus acciones brindan atención, defienden, promueven, conservan, preservan, asisten, acompañan y contribuyen a mejorar la calidad de vida de personas, familias, grupos, comunidades, así como de lugares y seres vivos que los rodean. Garantizando la atención para el bienestar individual y colectivo en una sociedad incluyente, para todos y todas. El cuidado puede ser informal o voluntario, o puede ser formal cuando se tienen parámetros procedimentales, de tiempo y económicos, entre otros, para ese desempeño (construcción colectiva, 2016).

 

 

En lo corrido de estas dos semanas, las personas mayores han participado activamente de un festival  lleno de actividades deportivas, artísticas y culturales permitiendo así la inclusión de esta población a los diferentes sectores de la sociedad. 

 

En Kennedy las personas mayores se vistieron como guardianes ambientales y recorrieron los humedales de la localidad. Igualmente participaron de encuentros intergeneracionales donde compartieron con los más pequeños saberes y experiencias que resultaron emotivas para las dos generaciones. 

 

Por su parte, en Usaquén los mayores participaron de un fashion show donde los mayores confeccionaron y desfilaron sus propios trajes, también asistieron a un encuentro deportivo con juegos tradicionales como el tejo y la rana compitiendo con los jóvenes de la localidad.  

 

 

“Participo en estos espacios porque me permiten demostrar la vitalidad, alegría y energía que las personas mayores aún tenemos”, señaló Mercedes Coto, participante mayor de la localidad de Usaquén. 

 

Demostrando su talento en el canto, los mayores de Chapinero participaron de un karaoke que los llevó a entonar las mejores canciones de antaño. También disfrutaron de una emotiva serenata por parte de las autoridades locales. 

 

Suba, Los Mártires, Engativá, Ciudad Bolívar, Sumapaz, Usme, Barrios Unidos y San Cristóbal también se han destacado en lo corrido del mes por el desarrollo de Cineforos, Viejotecas y exposiciones artísticas en las diferentes unidades operativas de la Secretaría de Integración Social. 

 

De esta forma, la administración ratifica su compromiso de promover espacios que permitan a las personas mayores ser más autónomas, participativas, respetadas valoradas y más felices. 

 

Bogotá Mejor para Todos invita a toda la población mayor y ciudadanía en general a seguir participando de la variada programación que se desarrollará durante todo el mes de agosto. 

 

 

 

Agricultura urbana, manejo de residuos, la importancia del agua, conciencia ambiental y efectos del cambio climático fueron algunos de los temas abordados durante el recorrido que transportó a los mayores a sus mejores épocas en el campo.

 

“Es muy importante para nosotros tener espacios como este, pues nos permite salir de la cotidianidad, compartir experiencias con personas de nuestra misma edad además de aprender sobre la responsabilidad ambiental que debemos proteger para las futuras generaciones”, manifestó Rosita, participante del recorrido.  

 

Como todos unos guardianes ambientales, durante la visita guiada por profesionales del Jardín Botánico, las personas mayores pudieron intercambiar experiencias y reflexionar sobre la importancia de convertirse en protectores de las reservas naturales que tiene la capital.  

 

 

 

“Estas salidas que promovemos en los centros Día le permite a las personas mayores  mantener  contacto con la naturaleza, reconocer la diversidad natural que los rodea y promover el cuidado de estos entornos naturales”, señaló Marco Peña, coordinador del servicio Social Centro Día de la Secretaría de Integración Social. 

 

Con actividades como esta, en agosto la administración distrital celebra en agosto el mes del envejecimiento y la vejez con más de 80 actividades a nivel local. Cine foros, diálogos de envejecimiento, encuentros intergeneracionales, actividades artísticas, culturales, deportivas y de reconocimiento son parte de la agenda de la conmemoración. 

 

 

Hacer el vestido no fue fácil. Tuvo que cortar lonas, coserlas, ponerle caucho a la falda, adherirle flores, botones y cintas y finalmente modelarlo. Situación nada sencilla considerando su edad. Sin embargo, con garbo y soltura, desfiló por la pasarela de madera del Teatro de la subdirección local de Usaquén.

 

“Para el vestido nos iban ayudando los talleristas del Centro Día ‘Casa del Árbol’. Ellos nos guiaron sobre cómo hacerlo y qué materiales utilizar. Llevo asistiendo más de un año al Centro y me siento feliz por los ejercicios físicos, por reunirme con mis compañeros y participar en las actividades que hacen”, asegura doña Claudina, quien modeló para más de 600 personas mayores, quienes estuvieron en el evento.

 

No fue la única. En las actividades que se realizaron en el lanzamiento también hubo danzas, flamenco, bambuco, carranga y otros bailes típicos, que fueron animados por las personas mayores, quienes se sientes más vivos que nunca en estos espacios.

 

“Creo que la vejez es bonita por las experiencias que uno tiene, la sabiduría. A mí me gusta lo de agricultura, amo la tierra y los niños. Lo más feo de la vejez es tal vez que a uno lo hagan al lado. Las personas mayores todavía tenemos mucha vida por delante, necesitamos es compañía”, agrega Doña Claudina mientras sonríe. La vida brilla en sus ojos.

 

El evento, que duró cerca de cuatro horas en donde, hasta en los pasillos del teatro, se veían personas mayores bailar, también hubo un encuentro intergeneracional. Silbidos y aplausos salieron de las manos arrugadas de los participantes, hacia los escolares, quienes les brindaron un tributo con ritmos mucho más modernos y juveniles.

 

“Bogotá cumple años y nosotros las personas mayores somos sus quinceañeras por eso lo celebramos”, dijo apoyada sobre su bastón, Anita Peña, otra de las participantes, y quien, con rosas hechas de papel crepé, mandaba besos a quienes la observaban.

 

 “Cuando nací, pobreza, me seguiste, me mirabas a través de las tablas podridas por el profundo invierno”. No le bastó con el desfile. Doña Claudina también recita poemas, y con esta frase, se despidió del auditorio. Se sentía feliz. De nuevo se sintió querida.

 

Las actividades del mes del envejecimiento y la vejez, se desarrollarán a lo largo del mes por todas las localidades. El mensaje es claro, las personas mayores son seres llenos de vida y energía, sólo necesitan los espacios para demostrarlo. 

 

 

 

 

 

 

Con una inversión de 738 mil millones de pesos para los servicios sociales de apoyos económicos, Centros Día, Centros Noche y Centros de Protección Social, la entidad fortalecerá la atención a la población mayor de la ciudad. Es la mayor inversión que ha hecho la Secretaría de Integración Social en temas de vejez.

 

Una de las apuestas de la entidad es la ampliación de cobertura en los centros Día de la ciudad llegando a la atención de 15 mil personas mayores de 60 años, además se extenderá la atención a los cuidadores de las personas mayores en estos centros ofreciendo capacitación, espacios de respiro con actividades de esparcimiento y el apoyo para que desarrollen una actividad productiva desde sus casas.

 

De esta forma, la administración distrital ratifica su compromiso con los mayores de la ciudad que hoy corresponde al 11% de la población y que en el 2020 pasará al 14% con más de un millón de personas mayores de 60 años. 

 

En agosto la administración distrital celebra el mes del envejecimiento y la vejez con más de 80 actividades a nivel local y distrital. Cine foros, diálogos de envejecimiento, encuentros intergeneracionales, actividades artísticas, culturales, deportivas y de reconocimiento en todas las localidades de la ciudad son parte de la agenda de la conmemoración.

 

A su vez la secretaria de Integración Social, María Consuelo Araújo Castro, informó sobre  presuntos fraudes del que vienen siendo víctimas las personas mayores, para recibir los beneficios económicos.  

 

Las denuncias fueron presentadas por algunos ciudadanos de las localidades de Kennedy y Chapinero frente a supuestos cobros a las personas mayores para quedar inscritos al programa de apoyos económicos que ofrece el Distrito. Al respecto, la entidad informa que no se requiere de intermediarios, ya que el trámite es gratuito e hizo un llamado a no dejarse engañar y denunciar a dichas personas.

 

Al parecer los falsos funcionarios abordan a las personas mayores o a sus familiares para indicarles que si quieren beneficiarse del apoyo económico deben entregarles una suma que oscila entre los 20 y 50 mil pesos para gestionar el trámite y recibir el apoyo económico.

 

 

 

Las denuncias fueron presentadas por algunos ciudadanos de las localidades de Kennedy y Chapinero frente a supuestos cobros a las personas mayores para quedar inscritos al programa de apoyos económicos que ofrece el Distrito. Al respecto, la entidad informa que no se requiere de intermediarios, ya que el trámite es gratuito e hizo un llamado a no dejarse engañar y denunciar a dichas personas.

 

Al parecer los falsos funcionarios abordan a las personas mayores o a sus familiares para indicarles que si quieren beneficiarse del apoyo económico deben entregarles una suma que oscila entre los 20 y 50 mil pesos para gestionar el trámite y recibir el apoyo económico. 

 

La entidad aclara que para acceder al apoyo económico o cualquiera de los servicios que presta la Secretaría no se requiere de intermediarios ni tiene ningún costo. Los interesados pueden acercarse a las subdirecciones locales de Integración Social con el documento de identidad y un recibo de servicio público para iniciar el proceso. 

 

La Secretaría Distrital de Integración Social también informó que el servicio de apoyos para la seguridad económica seguirá atendiendo a la población mayor que se encuentra en situación de vulnerabilidad socioeconómica y que cumpla con los criterios establecidos en la Resolución 764 de 2013.

 

Actualmente se entregan 85.491 apoyos a personas mayores.

 

Apoyos para la seguridad económica

 

El servicio social está dirigido a personas mayores de nacionalidad colombiana residentes en Bogotá, que se encuentran en situación de discriminación y segregación socioeconómica y que no cuentan con pensión o carecen de ingresos o rentas suficientes para subsistir o satisfacer sus necesidades básicas.

 

Para conocer los criterios de ingreso al servicio puede descargar el documento:  APOYOS PARA LA SEGURIDAD ECONÓMICA 

 

 

Agosto 1 de 2016. Con cine foros, diálogos de envejecimiento, encuentros intergeneracionales, actividades artísticas, culturales, deportivas y de reconocimiento en todas las localidades de la ciudad, la administración distrital conmemora en agosto ‘El Mes Distrital del Envejecimiento y la Vejez’.

Las actividades que se adelantarán durante el mes del Envejecimiento y la Vejez buscan promover acciones pedagógicas, académicas, lúdicas y de sensibilización dirigida a la ciudadanía en general para hacer un reconocimiento de los derechos de las personas mayores.

Actualmente en Bogotá hay 902 mil personas mayores de 60 años. En 2020 se calcula que serán 1.153.000 un 14% total de la población.

De acuerdo al plan de desarrollo distrital, Bogotá Mejor Para Todos, se pretende incrementar en un 25% la vinculación de personas mayores en los centros de protección  donde reciben servicios integrales durante el día como recreación, capacitación, talleres productivos y apoyo psicosocial.

Los 80 eventos que conmemoran el mes de la vejez  a nivel local y distrital buscan motivar la reflexión frente a las condiciones y situaciones que vivencia este grupo poblacional y sentar las bases para la planeación y desarrollo de futuras acciones de política pública que aporten a la realización de sus derechos.

A nivel distrital, el próximo 18 de agosto se realizará un evento de Reconocimiento a las personas mayores cuidadoras en las instalaciones del IDRD. El 20 de agosto en el Centro de Protección Social Bosque Popular las personas mayores gozarán de un encuentro familiar denominado ‘Al ritmo de la Vida’. Así mismo, el 30 de agosto se llevará a cabo el panel: personas mayores maestros de resilencia en el auditorio Huitaca de la Alcaldía Mayor de Bogotá. 

Para conocer el detalle de la programación local se puede ingresar awww.integracionsocial.gov.co o en las diferentes subdirecciones locales de Integración Social.

“¿Vieja?, vieja la cédula”, dice doña Mery entre risas mientras busca una pareja para bailar la próxima canción. Su cintura aún se contonea. Por su parte don Polo hace lo propio para seguir el ‘parrandón’.