Bogotá, 9 de agosto de 2017. Vivir dignamente y contar con el cariño permanente de la red familiar, fueron varias de las conclusiones que dejó el encuentro del Consejo Local de Política Social para Vejez, en la localidad Antonio Nariño, liderado por la Secretaría de Integración Social y el Consejo Local de Sabios. 

‘Vivir como se quiere en la Vejez’ fue uno de los ejes centrales en donde se dieron a conocer las inquietudes y propuestas de cada uno de los actores, funcionarios y población de las personas mayores que asistieron a las instalaciones de la Universidad Nacional a Distancia.

Las personas mayores coincidieron que se debe envejecer en el entorno familiar, rodeados de los seres queridos y al interior del núcleo social, pues, con ello se garantiza vivir en un ambiente de tranquilidad y estabilidad. Sus inquietudes fueron transmitidas al alcalde mayor, Enrique Peñalosa, quien tiene como prioridad a las personas mayores.

En el Consejo se destacó que Vivir en óptimas condiciones no sólo consiste en tener un buen lugar donde pasar momentos con la familia y la sociedad en general, sino también, contar con los recursos suficientes e indispensables para satisfacer las necesidades básicas de la vejez. Se requiere tener acceso a la salud, a la vivienda digna, a la educación, a la alimentación, a la seguridad social y derecho a la movilidad”.

En el evento se trabajó en la promoción de acciones orientadas a que las personas mayores participen activamente en la vida social, política y económica del país. Así mismo se reiteró que las personas mayores deben recibir la debida información sobre los temas que les interesa. Finalmente se hizo énfasis en el libre desarrollo de su personalidad, su conciencia religiosa y de culto, entre otros aspectos.

Al conversatorio asistieron Arthur Bernal, subdirector local de Antonio Nariño y el alcalde local de Antonio Silgado, quienes trabajan mancomunadamente por el bienestar de esta población en ese sector de la capital.

 

 

 

Bogotá, agosto 1 de 2017. Bajo el liderazgo de la Secretaría de Integración Social, la ‘Bogotá Mejor para Todos’ celebra en agosto el ‘Mes del Envejecimiento y la Vejez’, el cual con el lema ‘Envejece Conmigo’, busca que la ciudad haga un homenaje a las personas mayores y los reconozca como actores fundamentales de nuestra ciudad.

“’Envejece Conmigo’ es una invitación a la sociedad y a las familias para que acompañemos, queramos y respetemos a todos nuestros ciudadanos mayores.”, resaltó la secretaria de Integración Social, María Consuelo Araújo Castro, quien invitó a los capitalinos a respetar, querer y consentir a nuestros viejos.

Adicional a las actividades locales, el Distrito tiene programado una serie de eventos especiales para conmemorar este mes. Entre otros, se llevará a cabo un ‘bicipaseo’, el próximo 20 de agosto, y una carrera atlética el 27. Esta programación está encaminada a demostrar que en la vejez se puede realizar cualquier tipo de actividad, mientras haya el deseo y la vitalidad para llevarlas a cabo.

También se realizará el conversatorio ‘Mitos y realidades de la sexualidad en la vejez’. Allí se hará un acercamiento a este tema que es de gran interés de las personas mayores, pero que aún es un tabú para la mayoría.

Otros eventos serán el reconocimiento a redes de apoyo que trabajan por la promoción y el cuidado de las personas mayores (31 de agosto), un picnic familiar en donde podrán compartir ciudadanos de diversas edades (26 de agosto) y el gran cierre del mes que se hará con un festival de comparsas el primero de septiembre.

“Vivir dignamente y feliz en la vejez es hacerlo de forma plena sin importar la edad. Además, porque todos los seres humanos envejecemos desde que nacemos. Es un proceso natural que es necesario vivirlo a plenitud”, puntualizó la Secretaria.

El llamado que hace el alcalde mayor, Enrique Peñalosa Londoño, en este mes tan especial no es un asunto menor. Bogotá, al igual que el país, está inmerso en un proceso de envejecimiento acelerado, producto entre otras de los avances de la medicina y de los buenos hábitos de vida. En 2050 Bogotá será la región del país con los índices de envejecimiento más altos y la población mayor de 60 años será equivalente al triple de la población mayor actual.

"La invitación es para que entre todos celebremos y reconozcamos a nuestras personas mayores. Ellos son miembros importantes de nuestra sociedad. Su sabiduría y experiencia son invaluables. Celebremos la vejez como lo que es, un proceso natural que nos compete a todos. Esta es una oportunidad para abrazar y no ahorrar ninguna muestra de cariño por nuestros mayores", concluyó la Secretaria de Integración Social.

 

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Bogotá, agosto 4 de 2017. Vestidos con trajes típicos, trenzas, alpargatas, desafiando la lluvia y el intenso frío, cerca de 500 personas mayores provenientes de los servicios que para esta población presta la Secretaría de Integración Social en la localidad de Ciudad Bolívar, marcharon en medio de la música, el baile y arengas. 

 

Ana, María, y Luisa, matronas de la zona, caminaron con la convicción de contagiar a los jóvenes de ese entusiasmo con el que cada día enfrentan la vida para realizar sus tareas. Para Héctor, Carlos y Alirio, ser personas mayores no debe aislarlos de una sociedad a la que pueden aportar sus sabidurías y experiencias y más cuando tienen espacios como los que les brinda el alcalde mayor, Enrique Peñalosa Londoño.

 

 

Adriana Poveda, del proyecto de Vejez y Envejecimiento de la localidad 19, indicó que el carnaval es el escenario perfecto para integrar a las personas mayores con otras poblaciones. “Hacemos un encuentro intergeneracional donde los demás participantes pueden evidenciar que las personas mayores son entusiastas y hacen parte de activa de una sociedad que los necesita. Para ello el alcalde Peñalosa ha hecho un gran aporte, ha estado pendiente de los diferentes temas que aquejan a las personas mayores además de la ayuda que se brinda con los apoyos económicos”, dijo Adriana.

Francisco Velásquez, subdirector local de Ciudad Bolívar, indicó que las personas mayores son claves como referentes para las nuevas generaciones. “Estamos con nuestros adultos mayores aquí en ‘El Carnaval de la Vida’, cada día estamos todos estamos envejeciendo y queremos que la vejez no se viva sola, que sea un proceso natural y digno”, concluyó el funcionario.

El recorrido del Carnaval de la Vida que inició en la Sede de la Universidad Distrital en Ciudad Bolívar y finalizó en la casa de la cultura con muestras folclóricas y culturales.

 

 

 

Bogotá, agosto 2 de 2017. Provistos de tapabocas, escobas, guantes, recogedores y garlanchas un centenar de personas mayores que asisten al servicio de Centro Día de la Secretaría de Integración Social participaron en la jornada ‘Limpiemos Nuestro Parque’.

Esta actividad, que busca integrar a los beneficiarios de los centros para ser multiplicadores de la apropiación de los espacios comunes como son los parques barriales, hace parte de las iniciativas que el alcalde mayor, Enrique Peñalosa Londoño, viene trabajando para recuperar los barrios de la capital para que niños y personas mayores los disfruten.

La jornada ‘Limpiemos Nuestro Parque’ desarrolla acciones, además, que contribuyen al acceso de ambientes más sanos no solo para los viejos sino también para las comunidades en general.

Esta acción permite involucrar activamente a la persona mayor como parte de una comunidad que se interrelaciona diariamente con su entorno y de este modo fomenta condiciones de salubridad y sostenibilidad necesarias para una vida digna.

En las jornadas de aseo participaron usuarios de los Centros Día; ‘La Montaña del Saber’, de la localidad de San Cristóbal, ‘Macondo’, de la localidad de Tunjuelito; ‘Mi Refugio’ de Los Mártires, ‘Uecha’, de Antonio Nariño, ‘Tierra de Saberes’ de Barrios Unidos; Años Dorados, de Santafe - Candelaria, ‘Celebra la Vida’, de Usme, ‘El Bosque’, de la localidad de Engativá, la ‘Alegría de Vivir’, de Suba, ‘Palabras Mayores’ en Rafael Uribe Uribe y ‘Carlos Gaviria’ en Ciudad Bolívar.

Al final de la jornada rostros alegres fueron el indicador adecuado de haber cumplido la misión de embellecimiento de los parques. La actividad hace parte de la Política Pública de Envejecimiento y Vejez y contó con el acompañamiento de los responsables y profesionales de cada uno de los servicios, quienes junto con los participantes disfrutan de una ‘Bogotá Mejor Para Todos’.

 

 

 

Bogotá, julio 24 de 2017. A un año de haberla conocido, ya sabía que su corazón no palpitaba, sino suspiraba por ella. Era el mes de marzo de 2015 cuando la vio por primera vez y de ahí en adelante no se le borró esa figura de ojos resplandecientes y mirada tierna.

A ella su timidez no le permitía pensar más allá de lo que se conoce como amistad. Un gran hombre, humilde, cariñoso y detallista, que no la dejaba de observar cada vez que la perseguía con su mirada.

La vida tiene sus cosas buenas, pero en esta oportunidad, la ‘Bogotá Mejor Para Todos’ contribuyó para que el amor floreciera en estos dos seres que hoy se benefician de los servicios que presta el Centro Día ‘Caminos de vida’ de la Secretaría Distrital de Integración Social y ubicado en el barrio Patio Bonito, de la localidad de Kennedy.

Se trata de Flor Alba Barrera, de 61 años, y Luis Eduardo Vargas, de 69, quienes se conocieron en el Centro Día a comienzos de 2015. Juntos son viudos y comenzaron una amistad que poco a poco fue creciendo y floreciendo en el servicio social.

 

Entre íres y veníres fortalecieron sus lazos de amistad. Compartieron sus problemas, necesidades, amistades, se convirtieron en cómplices y amigos inseparables. Con el tiempo se enamoraron y comenzaron una relación afectiva, relación que a sus familias en principio no gustó, por lo que debieron enfrentar muchos obstáculos.

Sin embargo, el amor entre ellos cada día era más y más grande, más y más fuerte. Sus familias poco a poco fueron comprendiendo que esta pareja no tenía un capricho, pues a su edad ya no estaban para perder el tiempo y sí para aprovecharlo. Fue así como el amor y la complicidad de dos almas solitarias fue tomando forma e ilumino el rostro de ellos.

Es por tal razón, que decidieron unir sus vidas para siempre, poniendo como testigo a varios de sus compañeros del servicio social Centro Día, quienes presenciaron el gran acontecimiento del amor entre estas dos personas mayores.

De esta forma y en una ceremonia realizada en la parroquia San Martín, del barrio Britalia, esta pareja selló para toda su vida la unión de dos familias unidas por lazos de amor, fraternidad y cariño,

Esta hermosa pareja nos deja una gran enseñanza y es que mientras exista el deseo de ser feliz, no importa la edad. Mientras existan las ganas de vivir y mucho que compartir, aún vale la pena luchar por nuestros sueños y llegar a un feliz y placentero término de vida.

 

 

 

Bogotá, julio 12 de 2017. Desde hoy una treintena de adultos mayores y cuidadores de éstos saben qué hacer y cómo actuar para prevenir riesgos que generen accidentes en sus hogares, gracias al material didáctico audiovisual compartido por miembros del Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá en alianza con la Alcaldía de Chapinero. 

Pedro Manosalva, director de Bomberos de Bogotá, indicó que, “se busca sensibilizar a la población adulta mayor para asumir hábitos preventivos que puedan evitar accidentes para lograr unas condiciones más seguras en los hogares”.

“Muchos adultos mayores pasan mucho tiempo solos y expuestos a muchos riesgos por quemaduras, intoxicaciones, caídas y escapes de gas entre otros factores. Aquí lo que hacemos es identificar los accidentes más frecuentes que sufren las personas mayores en el hogar, analizar sus causas, y advertimos actitudes que deben tomarse para evitarlos”, dijo el director.

Para Hernando Quintero, alcalde local de Chapinero, la capacitación sobre prevención de riesgos no solo brinda herramientas de prevención a las personas mayores sino también la posibilidad de saber cómo atender una emergencia.

“Para nosotros es fundamental capacitar a todas las poblaciones sobre prevención de riesgos y los adultos mayores no son la excepción. Nos enaltece que personas mayores reciban conocimientos en atención de emergencias”, indicó el funcionario.

Al final del evento las personas mayores que recibieron su certificación se comprometieron no solo a asumir comportamientos preventivos para evitar accidentes caseros sino también a ser multiplicadores de la capacitación recibida a otras personas, porque quedó claro que es mejor prevenir que curar.

 

 

 

Bogotá, julio 5 de 2017. “He logrado una segunda oportunidad en la vida y la estoy encaminando a ayudar a las personas mayores para que, conjuntamente, logremos una vejez digna, activa y feliz. Todo de la mano de la Secretaría Distrital de Integración Social”. Así lo expresa Luciano Osorio, un exhabitante de calle, quien después de varios intentos de salir del mundo de las drogas, lo logró y hoy es un ejemplo de superación.

La vida de don Luciano Osorio es un acto de fe: a los 75 años de edad su voz madura da testimonio de sus reflexiones como exdrogadicto y exhabitante de calle. Hoy en sus palabras, es “una persona digna, un líder que apoya a la comunidad con la ayuda de la Secretaría Distrital de Integración Social; un ser humano que aprende y replica sus conocimientos a la comunidad; es un hombre valorado.”

Con orgullo muestra una constancia que da cuenta del proceso de rehabilitación culminado satisfactoriamente. En ella resaltan su buen comportamiento y su espíritu de colaboración, sumados a su material de líder y a su gran capacidad de comunicar.
Luciano es elocuente, pausado, muy formal a la hora de vestir y respetuoso en sus modales. Dista mucho del ser que dice que fue y recuerda a menudo la vida que en la calle llevó, consumido por el ‘bazuco’ y la marihuana.

No evita, ni evade su pasado. Por el contrario, abre su corazón y lo relata detalladamente, de tal manera que termina intimando con su interlocutor. Su inicio en las drogas se dio en los años 60’s, tenía 18 y cursaba tercero de bachillerato. Para entonces jugaba en un equipo de fútbol y en una de las canchas aledañas al Campin probó la Marihuana. Esa fue, según él, la entrada al bajo mundo, porque después del cannabis, vino el ‘bazuco’ y el autoabandono. “Yo prefería el vicio antes que la comida, perdí la autoestima y no me importaba nada”, dice.

En la década de los 80, entre sus 35 y 40 años de edad, fue la etapa más dura. Dormía en la calle, buscaba entre la basura que comer y se bañaba en el río. En ocasiones algunas personas le regalaban dinero. Lograba 2 mil pesos que pensaba gastar en gaseosa y pan, pero el deseo incontrolable por el ‘bazuco’ lo hacía cambiar de parecer. Caminaba 15 metros y de inmediato desviaba su camino a la ‘olla’ más cercana. En otras ocasiones vendía lo que podía, hasta la ropa en mejor estado y la negociaba obteniendo dinero para el vicio. Para ese entonces vivía en Villavicencio, solo, desamparado y lejos de su familia.

 

Su voz no se entrecorta; los recuerdos no lo amilanan. Por el contrario, es cuando con más fuerza y vehemencia habla, en especial cuando comparte el día en el que cansado de su estado le pide a Dios que lo ayude. Necesitaba y quería estar cerca de su familia. Fue entonces cuando tuvo una especie de epifanía. Justo allí, a un lado del río en el que dormía, manifestó su deseo desde el fondo de su corazón, se dirigió al parque del Hacha en Villavicencio y pronto dos señores lo recogieron llevándolo a un centro de rehabilitación.

En el programa duró 6 años. Afirma que no fue fácil, pues entraba y salía constantemente. Fueron más las recaídas que la constancia, pero aun así el deseo de liberarse de la adicción no lo abandonaba. Así que, con mucha fe en Dios logró un año en gracia: 12 meses en los cuales no consumió droga ni cayó en el autoengaño. Durante ese tiempo, dice, fue cuando más a prueba estuvo su fe, la fe en un Dios que no veía y no escuchaba pero que lo reconfortó y obró dentro en él.

Se siente agradecido con la vida, pues una vez superó su adicción, retornó a Bogotá donde recuperó a su familia. Ellos ahora reconocen su valor y su fuerza de voluntad. Para don Luciano otro factor importante en su historia fue llegar a Integración Social y a la subdirección local de Barrios Unidos.

Hoy se considera un hombre digno que ayuda a la comunidad pues les replica el conocimiento que aprende en las distintas actividades que participa dentro del programa de Desarrollo Humano en el Centro Día ‘Tierra de Saberes’. El programa fomenta los procesos de autonomía de las personas mayores en el ejercicio de una vejez digna, activa y feliz, potencializando el reconocimiento y la puesta en práctica de sus habilidades desde distintos ámbitos.

Precisamente en estas actividades aprendió a bailar bambuco, joropo y tango; éste último género musical es al que más se ha dedicado, presentándose en distintos escenarios. Don Luciano también participa de actividades deportivas como gimnasia, trabajos manuales y el hecho de poder compartir con adultos mayores iguales a él.

Dos días a la semana recorre barrios como El Gaitán, Modelo Norte, los Alcázares, la carrera 15 con calle 85 y hasta la calle 72, vendiendo bolsas para la basura y los recursos que obtiene, junto con el apoyo económico de 240.000 pesos bimensuales del Proyecto Envejecimiento Digno, Activo y Feliz, en el marco del cofinanciado de recursos de la Nación programa Colombia Mayor y el Distrito, logra su manutención.

Actualmente la Subdirección Local cuenta con 615 personas inscritas en este proyecto, 535 de la localidad de Barrios Unidos y 80 de la localidad de Teusaquillo.

Como el caso de don Luciano, hay miles de historias de personas que gracias a la ‘Bogotá Mejor Para Todos’, aprovecharon las segundas oportunidades y han hecho de sus experiencias una gran fortaleza.

 

 

 

Junio 29 de 2017. Diversos actores de estamentos gubernamentales del orden nacional y distrital, así como organizaciones sociales se dieron cita en la Procuraduría General de la Nación, para adelantar un diálogo en la búsqueda de mecanismos que garanticen la protección a las personas mayores y el derecho a una vejez digna. Durante el encuentro se abordó la pertinencia de una reforma al sistema pensional que pueda fortalecer el sistema integral de seguridad social.

Para Patricia Gómez, subdirectora para la Vejez, este pacto debe marcar el inicio del compromiso y la corresponsabilidad que debe haber en la protección y promoción de los derechos de las personas mayores.

"Su cuidado es responsabilidad de todos. La familia no puede estar ausente de este pacto. Ellos deben ser los principales actores de este pacto", precisó Gómez. “Es hora de plantearnos como estado, como sociedad, que estamos haciendo por nuestras personas mayores. Hoy en día es cada vez más frecuente el abandono y maltrato hacia nuestros adultos mayores. No podemos permitir que esto continúe, es hora que se castigue como debe ser, el abandono y el maltrato. Las familias no pueden seguir desplazando de sus núcleos familiares a sus mayores”, dijo la funcionaria.

Por su parte Fernando Carillo, Procurador General de la Nación indicó que se debe proteger a la vejez a través de un sistema solidario y eficiente.

“El sistema de protección a la vejez debe asegurar una tranquilidad económica y una vida digna. La política pública debe tener en su radar el mejoramiento del sistema de protección a la vejez. En el tema pensional no queremos más reformas que apaguen incendios de corto plazo. Se requieren reformas sostenibles a largo plazo. Las sociedades desarrolladas protegen a sus viejos a sus adultos mayores. Hacia ese objetivo debemos avanzar”, indicó Carrillo.

Juan Carlos López, gerente del consorcio ‘Colombia Mayor’ recalcó que el adulto mayor debe ser visibilizado y recuperar el papel protagónico que puede ofrecer desde su conocimiento y experiencias. “El adulto mayor en muchos hogares se vuelve invisible, se vuelve una carga, carece del cariño y el afecto que debe tener y como resultado son desplazados por su mismo núcleo familiar. En ‘Colombia Mayor’ tenemos información de abuelitos que son itinerantes, que van de hogar en hogar buscando donde vivir y esto no puede seguir sucediendo. Este foro es una gran oportunidad para establecer cómo se debe proteger al adulto mayor, su salud y su inclusión laboral entre otras. El adulto mayor no puede seguir siendo una carga para sus familias”, dijo López.

Para Santiago Montenegro presidente de Asofondos se hace necesario pensar en un sistema de protección a la vejez que responda a la realidad laboral del país. “En materia de pensiones tenemos básicamente cuatro problemas: primero, Baja Cobertura, segunda, la insostenibilidad fiscal del régimen público; tercera, inequidad (hay subsidios que son focalizados a las pensiones más altas) y cuarto, envejecimiento de la población”, manifestó Montenegro.

En la audiencia pública se destacó la prevalencia que debe tener en la sociedad colombiana la importancia de la cultura del ahorro para asegurar el futuro. Finalmente, en el foro se habló de la necesidad de un sistema de protección a la vejez que responda a la realidad laboral del país.

 

 

 

Junio 28 de 2017. Una de las estrategias para ocupar el tiempo libre y espantar recuerdos de ingratitud y abandono por parte de parientes a personas mayores, es el Taller Creativo que se realiza en el Centro de Protección Bosque Popular de la Secretaría de Integración Social. Allí a través del bordado y la costura manos llenas de sabiduría transforman hilos, felpa y espuma en estupendos peluches, cuadros y puestos de mesa.

Yadid Guarín, es la instructora que dirige el taller y gracias a su personalidad arrolladora y extrovertida contagia a las personas mayores de creatividad y los impulsa a desarrollar auténticas obras de arte.

“Aquí en este taller conversamos, reímos, lloramos. Este espacio es una terapia dinámica. Los primeros días las personas mayores que vienen asisten con recelo ya después vienen por gusto. Aquí no es solo coser, aquí se hacen amigos. Estamos rompiendo muchos mitos, como que loro viejo no aprende, muchos de ellos aprendieron el arte aquí y transmiten su saber a los demás, aquí se ve la solidaridad”, dice la profesora.

Todos los objetos que elaboran los adultos mayores en el Taller Creativo del Bosque Popular, se vuelven parte decorativa del centro y además son comercializados en ferias que se realizan mensualmente, lo que les genera una entrada económica que depositan en un fondo común para suplir algunas de sus necesidades.

“Este taller me genera una satisfacción enorme. A través de las dificultades de la salud (Parkinson) de muchos de nuestros participantes se visibilizan excelentes trabajos. El Taller Creativo es sin duda un catalizador. Cuando llegan acá se olvidan de los problemas personales, de salud, anímicos, la ansiedad. Este taller les genera armonía”, indica Guarín.

La instructora del taller hizo un llamado a la ciudadanía para cuidar a las personas mayores y aprovechar sus saberes. “Tenemos que aprovechar la sabiduría de las personas mayores que están en nuestros hogares. Me da duro la insensatez de las familias, la parte afectiva los derrumba. No hay que olvidar que todos vamos envejeciendo y vamos a recibir lo que dimos”.

En la actualidad 22 personas asisten juiciosamente al taller de creatividad para elaborar cuadros, vasitos, delantales, puestos de mesa, peluches. “Tres de mis queridos viejos se fueron para siempre físicamente, pero sé que están bordando en hilos dorados a los ángeles que me cuidan”, concluyó la profesora.

Con este tipo de talleres la 'Bogotá Mejor para Todos' garantiza que las personas mayores encuentren el espacio adecuado para sentirse útiles y además, desarrollar labores que dignifiquen su vejez.

 

 

 

Bogotá, junio 16 de 2017. “Ustedes no nos olvidan y cada día vivimos algo distinto y maravilloso. Gracias por compartir con nosotros”. Con estas sencillas y humildes palabras, doña Fanny Martínez, persona mayor que hace parte del Centro Día ‘Mi Refugio’, le agradecía a los servidores de la Secretaría Distrital de Integración Social, la atención y los cuidados que a diario les prestan.

Y fue precisamente el Centro Día ‘Mi Refugio’, de la Localidad de los Mártires, el epicentro de la celebración del “Día mundial de la toma de conciencia contra el abuso y el maltrato hacia las personas mayores”, y realizado en el parque el Renacimiento de esta localidad.

Se trató de un acto simbólico en el que los niños y niñas de los centros Amar I y II y funcionarios de la subdirección Local de la SDIS, encabezado por la subdirectora Mirna Esther Higuera Bohórquez, rindieron un homenaje con flores, cartas, bailes, obra de títeres y emotivos mensajes de afecto hacia las personas mayores que pertenecen al servicio social Centro Día ‘Mi refugio’.

Al finalizar del acto se realizó una calle de honor mientras inclinaban sus cabezas reverentes al paso de las personas mayores, que entre lágrimas de emoción agradecieron el sincero homenaje.

“Quiero dar los agradecimientos a todo el grupo de profesionales, que realmente hicieron maravillosa esta mañana para nosotros los abuelos y a los niños quienes estuvieron compartiendo con nosotros. Fue algo maravilloso porque nos damos cuenta que no nos han olvidado y que cada día para nosotros es vivir algo distinto”, dijo doña Fanny.

“Gracias a todos y cada uno de los profesionales que hicieron un rato tan agradable como el día de hoy, por el tiempo que se han apersonado y a la doctora Mirna quien siempre nos acompaña. Yo les doy mis más rendidos agradecimientos y una venia también para ustedes”, finalizó.

En las subdirecciones locales de Integración Social las personas mayores tienen espacios propicios para su diversión y el desarrollo de lazos de afecto.